Ante las quejas de los habitantes del Jarillón del Río Cauca que dieron pie a una marcha pacífica este martes, el gerente del proyecto Plan Jarillón de Cali, Juan Diego Saa, invitó a la comunidad a que siguiera negociando su reubicación directamente con el municipio.
Según Marleny Taborda, habitante del Jarillón entrevistada por Blu Radio, “la Alcaldía Municipal no ha socializado el Plan Jarillón con la comunidad, aquí hay que familias están asentadas hace más de 50 años en este sector y nos están ofreciendo unos apartamentos de aproximadamente 38 metros cuadrados, donde nadie podría vivir».”
Ante esto, el gerente del proyecto Plan Jarillón aseguró que la administración municipal ha garantizado los derechos de los ciudadanos y ha cumplido con todos los compromisos adquiridos, e invitó a las familias a una negociación pacífica que las libre de riesgos.
A la fecha, el proyecto Plan Jarillón de Cali ha entregado 3.806 millones de pesos en compensaciones económicas para facilitar el traslado de las familias y de las unidades productivas. De la misma forma, 2.208 familias han sido reasentadas voluntariamente, con el propósito de detener el deterioro del Jarillón y facilitar su reforzamiento.
“Recuperar el Jarillón de Cali es una directriz del Gobierno Nacional debido al alto riesgo de inundación en el que se encuentra la ciudad por el posible rompimiento del dique (…) la Administración Municipal está llamada a proteger la vida de los caleños y lo que sucedió en Mocoa y Manizales es una alerta para nosotros”, añadió el funcionario.
Saa afirmó que se han ofrecido opciones de negociación, pero estas han sido rechazadas por algunas personas. La Alcaldía ha dispuesto mesas de concertación con la comunidad para escuchar sus peticiones y llegar a acuerdos que beneficien a ambas partes, pues las restituciones o los desalojos son la última media que se quisiera tomar.
Las personas que estén interesadas en que su situación sea evaluada deben acercarse a las oficinas del proyecto o a la Casa de Justicia Alfonso López, donde hay un punto de atención permanente para iniciar la negociación con las familias que ya han sido verificadas.