Desde este martes y por diez días como tiempo reglamentario, el Concejo de Cali discutirá en tercer debate dar facultades especiales al alcalde Maurice Armitage para que lleve a cabo su propuesta de reforma administrativa.
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Como se recordará, la reforma administrativa que quiere llevar a cabo Armmitage pretende aumentar el número de trabajadores del Municipio vinculados con contrato laboral en vez de con contratos de prestación de servicios, modalidad predominante hoy en día.
Concejales de las comisiones permanentes de Plan y de Presupuesto definirán si cierran el estudio al proyecto después de realizar algunas modificaciones a los artículos y al título del mismo.
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En efecto, algunos cabildantes propondrían eliminar dos puntos de la propuesta de Armitage: el primero que hace referencia a la adscripción de entidades descentralizadas del Municipio, y el segundo que tiene que ver con vincular a la Corporación en el proceso de ejecución de la reforma administrativa mediante una comisión y una mesa de trabajo.
Los concejales Roberto Rodríguez Zamudio y Juan Manuel Chicango aseguraron que la Corporación ha sido dedicada en el estudio del proyecto, y que por ello mismo se ha identificado que hay desajustes.
“Ahora corresponde al gobierno local acoger o rechazar las sugerencias del Concejo en el estudio del proyecto”, sostuvo Rodríguez Zamudio.
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No obstante, pese a lo que dicen los concejales sobre el proyecto, diversos sectores han acusado a los cabildantes de querer presionar al alcalde Armitage para que les dé participación y cuotas burocráticas para aprobar la reforma.
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