Habitualmente hablan de fiestas, de situaciones entre parejas y de las complicaciones de la cotidianidad, todo visto desde una mirada jocosa y juguetona.
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Y pese a que son nacidos en los pueblos y las montañas de Antioquia, los ‘melomerengues’ tienen un lugar importante en Cali, codeándose con la tradicional salsa y artistas que siempre hacen presencia en la ciudad en diciembre como Alfredo Gutiérrez y Lisandro Mesa.
Publimetro recopila cinco de las canciones de este tipo que más suenan en la capital del Valle del Cauca.
‘Dele por ahí’ de Gildardo Montoya
El doble sentido y dejar frases inconclusas para la imaginación del escucha es el arma más poderosa del éxito de esta canción, grabada en 1975 por Gildardo Montoya, un campesino recolector de café nacido en 1940 en Támesis (Antioquia) y muerto en Medellín en 1976, con solo 36 años, después de ser atropellado por un carro.
‘Aguardiente pa’l chofer’ de Gildardo Montoya
Otra ingeniosa canción de comienzos de la década de los setenta del artista antioqueño que juega con el doble sentido. Esta versión, interpretada por Joaquín Bedoya y su Conjunto, es la más conocida de esta canción.
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‘El desempleado’ de Leonardo Marín
‘El apachurrao’, como se hace llamar Marín, es uno de los representantes contemporáneos más importantes de los ‘melomerengues’. Esta canción de 2008 es muestra de ellos. En una ingeniosa situación, él mismo habla con Dios y le cuenta que haría lo que fuera para emplearse y ganarse el sustento.
‘La boquitrompona’ de Bernardo Sánchez
Esta es otra de esas ‘joyas’ que solo salen a relucir en diciembre. Original de 1987 e interpretada por Bernardo Sánchez, nacido de Santa Bárbara (Antioquia), ‘La boquitrompona’ es bien recordada por su frase “el todo es que tenga… El todo es que tenga… El todo es que tenga bien limpiecito su corazón”.
‘El arruinao’ de Gildardo Montoya
Esta canción vio la luz en 1975, por el mismo disco de ‘Dele por ahí’. Esboza una serie de situaciones hipotéticas que se convierten en risibles cuando el cantante las desvirtúa con su triste realidad, llena de miseria y falta de comida. “Si hubiera de eso, yo comia con desto, pero no hay des opa comer con desto”, dice.