A través del Decreto 565 de 2017 la Alcaldía de Peñalosa tenía previsto realizar obras dentro de los humedales, contempladas en ciclorrutas, senderos peatonales, alamedas, plazoletas, luminarias y adoquinado.
PUBLICIDAD
Aunque el decreto fue suspendido por orden judicial, el Distrito continuó realizando las obras, amparándose en el Plan de Ordenamiento Territorial (POT).
Recientemente, juez cuarto administrativo de Bogotá se volvió a pronunciar frente al tema.
¿Continuarán las obras en los humedales de Bogotá?
Conozca a continuación cómo se ha desarrollado el proceso:
- El 18 de diciembre de 2018 el juez cuarto administrativo decretó medidas cautelares dentro del proceso y suspendió los efectos del decreto 565 de 2017.
- Según denunció la Concejal María Fernanda Rojas, en lo corrido de este 2019 “la Administración ha venido adelantando varias obras dentro de los humedales de la ciudad”. Por tal razón, la cabildante acompañó el 12 de abril a radicar un desacato en contra de la administración Distrital.
- El 25 de abril se abrió un incidente de desacato contra el alcalde de Bogotá, Enrique Peñalosa, y el 9 de mayo contra el Secretario de Ambiente, Francisco Cruz Prada. Los procesos están en curso. Frente al presunto desacato, el Distrito, en su defensa, ha sido enfático en que “las obras de recreación pasiva se permiten hacer, amparadas en el POT”.
- El pasado martes se llevó a cabo la audiencia inicial dentro del proceso de nulidad en contra del decreto 565. Tras finalizar el encuentro, el Acueducto de Bogotá anunció que el “juez cuarto administrativo de Bogotá confirmó que las obras en los humedales adelantadas por la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá no están suspendidas”. De acuerdo con la entidad, esta decisión confirma que dichas obras se amparan en el Plan de Ordenamiento Territorial (POT), ratificando así el cumplimiento de las normas jurídicas y ambientales de las mismas. Contraria a la interpretación del Distrito, para la concejal Rojas resaltó que “la autoridad judicial definirá la suspensión de construir en los humedales en el desacato que resolverá en próximos días”. Según explicó, en la audiencia se ordenó remitir copia del expediente a la Procuraduría para que se inicien las indagaciones e investigaciones para determinar si con las obras que se están adelantando en los humedales existen infracciones contra el ambiente que ameriten el uso de sus facultades preferentes.
Entrevista
Ciromar Lemus Portillo, profesor investigador del programa de ingeniería ambiental de la universidad Manuela Beltrán.
¿Cuál es su apreciación de las obras contempladas por la Alcaldía de Bogotá en los humedales?
Las aves, por ejemplo, serán las primeras en afectarse, porque vamos a tener un recorrido de gente moviéndose en la zona, lo que provocará que las aves huyan del lugar o se abstengan de hacer presencia allí. O sea que se pierde realmente el escenario paisajístico.
Desde el punto de vista hidrodinámico, los humedales son reservorios de agua para la ciudad de Bogotá, entonces al crear obras vamos a meter material que no es acorde a al material del tipo de suelo, como el cemento. Y eso genera cambios en la dinámica de almacenamiento y distribución del agua dentro del humedal.
En la zona aledaña del humedal Juan Amarillo se contempla la construcción de canchas sintéticas, ¿qué opina al respecto?
El primer impacto que va a generar en los humedales será el ruido. Imagínense a las personas jugando en horas de la noche, por ejemplo. Eso perturbará el entorno de las aves y peces, pues sus dinámicas se dan en horas de la noche.
Lo otro es que esas obras no estarían respetando la ronda hídrica del escenario como humedal.
PUBLICIDAD
En la ejecución de las obras se han talado árboles, ¿cuál es la afectación?
Los árboles son reservorios del CO2, entonces va a haber una variabilidad en la disposición de gases, se tendrán efectos de cambio de temperatura y vamos a tener eventos de mayor contaminación.
También le puede interesar:
