La Administración Distrital anunció el inicio de la adecuación del “sendero ecológico” en el humedal Juan Amarillo, también conocido como Tibabuyes.
De acuerdo con el Distrito, el proyecto de conexión de este ecosistema, ubicado en el occidente de la capital, busca adaptar un sendero elevado de 1,2 kilómetros de longitud.
“Es una conexión ambiental de los sectores populares del occidente de Suba: Lisboa, Santa Cecilia, Villa Cindy a los sectores de Engativá: Ciudadela Colsubsidio, El Cortijo, Bolivia, para seguir por la ciclorruta del parque lineal Juan Amarillo hacia el resto de la ciudad”, señaló el alcalde de Bogotá, Enrique Peñalosa.
Asimismo, recalcó que con la adecuación de la conexión del humedal se minimizarán los impactos ambientales por el paso informal de personas, puesto que se han identificado más de diez pasos y senderos utilizados por la comunidad para el cruce tanto por el borde del cuerpo de agua como por el jarillón.
La apuesta de la Alcaldía
En la obra, que estaría lista en noviembre de 2019, se proyecta una estructura a manera de pasarela, con miradores, para que los ciudadanos transiten: “Al ser elevada evita el fraccionamiento del ecosistema. Es totalmente permeable y permite el paso de la luz y el agua evitando fraccionamiento y así, protege el entorno en el que nos encontramos. Será construida en un material prefabricado en concreto postesado, que da luces más amplias y permite mínimos apoyos en el borde sur del humedal”, explicó Bibiana Rodríguez Campos, asesora de la gerencia general del Acueducto de Bogotá.
La misma entidad señala que en los últimos dos años ha ejecutado en el Juan Amarillo acciones que comprenden el retiro de 10.528 toneladas de material vegetal, la recuperación de 15.2 hectáreas de espejo de agua y la corrección de 811 puntos de conexiones erradas que tenían cinco puntos de carga contaminante sobre el humedal, como parte de la apuesta de la alcaldía de Enrique Peñalosa “para salvar los humedales de la ciudad”.
¿Qué tan ecológico será el sendero?
Tras el anuncio de la Alcaldía, la Mesa Distrital de Humedales citó este martes a una reunión extraordinaria, en la que se concluyó presentarle un manifiesto a la Personería de Bogotá, en el que se solicita una audiencia pública “donde que la ciudadanía bogotana tenga conocimiento real de los qué es este proyecto”.
Héctor Henry Lorenzama, delegado del cabildo indígena Muisca de Suba y miembro de la Mesa Distrital de Humedales, expresó a PUBLIMETRO tras finalizar el encuentro que “estos senderos no presentan características de respeto ecológico y ambiental, y por el contrario hacen un grave daño a la estructura ecológica principal de Bogotá”.
Por tanto, los miembros de la Mesa exigen que la Personería “convoque a todas las demás entidades que necesitan hacer incidencia y respaldo a la ciudadanía para ejercer las acciones de control a este proyecto”, ya que aseguran que los derechos de los habitantes de la capital han sido violados, porque no se han tenido en cuenta.
Por su parte, la Fundación Humedales Bogotá también ha elevado su preocupación con la intervención que se realzará en Tibabuyes.
Según la organización, el proyecto contempla varias obras de impacto negativo al ecosistema, entre las que se destacan senderos elevados, puentes, zonas de acceso y miradores.
Después de escuchar a varios ciudadanos, pertenecientes a grupos de veeduría y comunidad aledaña, la Fundación destacó varias inconsistencias del proyecto, dentro de las que se destacan que “la obra fragmenta el ecosistema, genera interrupción en el tránsito de la fauna”, pues esto ocurre «cuando un hábitat grande se reduce y se subdivide en dos o más fragmentos”; además se objeta que “el Acueducto de Bogotá ,que es la entidad encargada de la obra, no ha socializado con la comunidad los estudios técnicos pertinentes, desconociendo impactos ambientales en el ecosistema”.
Por tanto, advierten que esta es una obra con serios cuestionamientos, que debería ser suspendida.