Bogotá

¿Qué implicaciones tiene declarar ilegal el paro de Aguas de Bogotá?

La decisión de la Sala del Tribunal Superior de Bogotá que declara la ilegalidad del paro de Aguas de Bogotá, salpica directamente a cuatro sindicatos.

Conozca qué implicaciones tiene declarar ilegal el paro de Aguas de Bogotá. 

La decisión de la Sala del Tribunal Superior de Bogotá que declara la ilegalidad del paro de Aguas de Bogotá, salpica directamente a cuatro sindicatos (Asodetrapul, Sintraguas, Sintraemsdes y Sintraasdecol).

El Tribunal calificó las acciones de estas cuatro asociaciones consistentes en impedir la recolección de residuos sólidos como un delito ambiental, recalcando que esta actividad es un servicio público esencial.

Cabe recordar que este paro inició con el cese de actividades de, aproximadamente, 300 trabajadores de Aguas de Bogotá días antes de que modelo de aseo pasará nuevamente a manos de los privados.

Una de las acciones más claras de este paro sucedieron el pasado 31 de enero, fecha en que un grupo de trabajadores que se tomaron el centro de operaciones del aseo de Aguas de Bogotá, impidiendo la salida de los camiones de basura.

El balance de ese día, de acuerdo con la Alcaldía de Bogotá, fue la afectación de 67 vehículos recolectores, presutamente, a manos de algunos de los trabajadores de Aguas de Bogotá.

El Distrito siempre ha calificado estos hechos como “actos vandálicos” que solo pretendían un “sabotaje de la operación”.

Fue tal el revuelo de ese día, que desde entonces la Administración tuvo que declarar emergencia ambiental y sanitaria hasta el 12 de febrero, fecha en que entraron operar las cinco nuevas empresas de aseo en la capital (Promoambiental Distrito, Limpieza Metropolitana, Ciudad Limpia, Bogotá Limpia, Área Limpia).

Las implicaciones

La versión de los trabajadores de Aguas de Bogotá presentes en dicha manifestación es muy diferente a la del Distrito, pues aseguran que no sabotearon los vehículos que el Distrito asegura.

Así lo aseveró en conversación con PUBLIMETRO Orlando Quiroga, presidente del sindicato Sintraemsdes: “hay que decir que el patio donde estaban esos camiones ya estaba convertido en un cementerio, donde habían cerca de 130 vehículos que ya no estaban habilitados para operar (…) ese día (protesta) los vehículos que servían estaban en operación por fuera del patio y los que dicen que dañaron, ya lo estaban (…) es una calumnia decir que en cinco minutos los trabajadores de Aguas de Bogotá dañaron todos esos camiones”.

Lo cierto es que por lo pronto el Tribunal Superior de Bogotá le está dando la razón a la Administración Distrital.

Con ello, los cuatro sindicatos antes mencionados quedan en el ojo del huracán, puesto que ya se tiene de precedente lo que actualmente está sucediendo con los trabajadores de Avianca, quienes están siendo despedidos simultáneamente, dado que su cese de actividades también fue declarado ilegal.

La diferencia es que los trabajadores de Aguas de Bogotá de todas maneras se quedaron sin trabajo desde día en que inició el nuevo modelo de aseo, en un hecho que ha sido calificado por ellos como una “masacre laboral”, ya que el Distrto no estipuló en los contratos de las nuevas empresas de aseo que estos operarios debían ser reubicados, pues este punto lo dejó a la buena intención de las empresas.

Entonces, si no los pueden despedir, ¿qué implicaciones tiene el fallo del Tribunal Superior de Bogotá?, José Alexander Pardo, presidente Sintraguas, explicói en diálogo con PUBLIMETRO que esta acción acarrea “que acaben con la personería jurídica de estos sindicatos, es decir, que ya no existan más (…) pero lo más grave de esta decisión es que los trabajadores de estos sindicatos no van a poder reclamar sus derechos adquiridos, no van a poder interponer alguna demanda. Entonces si alguna persona quiere reclamar alguna indemnización, por ejemplo, por enfermedad laboral ya no lo podrá hacer, porque de inmediato le van a sacar el fallo del Tribunal Superior de Bogotá”.

Por su parte, Orlando Quiroga añade que está situación es inconcebible, por lo que ahora lo que sigue es “apelar” el fallo del Tribunal, ya que hay muchos casos de personas que eventualmente podrían demandar, como madres cabeza de hogar, personas con enfermedad laboral, operarios que estaban a punto de pensionarse, entre otros, ya que cada caso es diferente: “con esto trataran de justificar el despido ilegal de una población vulnerable”.

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