En las últimas horas la policía de Bogotá capturó en la localidad de Suba, a un hombre acusado de robar a por lo menos ocho personas en una sola noche. Sin embargo, al momento de revisar sus antecedentes se encontraron con éste no solo es un ladrón, sino también un asesino.
Los hechos ocurrieron en el barrio Mazurén, cuando el hombre robó a una mujer que llegaba a su casa, luego, metros más adelante asaltó a un adulto que llegaba a su apartamento, posterior a estos robos, ultrajó a un joven universitario y finalmente a un ciclista.
Por estos hechos, la última víctima, el ciclista, decidió dar aviso a las autoridades quienes lograron capturarlo y cuando estaban en el CAI de Mazurén, las otras cuatro personas llegaron a denunciarlo, también por el delito de robo.
Cuando el hombre fue puesto a disposición de la Fiscalía e investigaron sus antecedentes se dieron cuenta que se trataría de un asesino de la ciudad de Medellín, además el hombre cuenta con tatuajes de lágrimas, lo que le causó curiosidad a las autoridades, todo parece indicar que cada lágrima que tiene tatuada en su rostro es de cada víctima que habría asesinado.