Rafael Uribe Noguera tuvo que esperar la llamada de su abogado para saber que el juez encargado de su caso lo sentenció a 51 años y 8 meses de prisión por el asesinato y violación de la pequeña Yuliana Samboní. Desde ayer se supo que el arquitecto bogotano no asistiría a la audiencia por cuestiones de seguridad, pero ni siquiera por teleconferencia escuchó lo que se tenía que decir en el Juzgado 35 penal de circuito de Paloquemao, en donde, desde las 8:00 a.m., se leyó la decisión final de uno de los casos más estremecedores y tristes del país.
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El trabajo de la Fiscalía fue clave para que el confeso homicida fuera sentenciado y recluido en la cárcel La Picota, pues de acuerdo con la investigación Uribe Noguera raptó a Yuliana Samboní el 4 de diciembre de 2016 en el barrio Bosque Calderón y posteriormente la llevó al edificio Equus 66 en donde la violó y asesinó. El cuerpo de la niña fue encontrado debajo del jacuzzi del domicilio.
La Fiscalía también pudo establecer que Yuliana fue golpeada y maltratada por Uribe Noguera, hechos que él mismo confesó hace un par de meses en la audiencia de imputación de cargos. Finalmente, la estocada final del ente investigador se dio luego de las pruebas recolectadas en el cuerpo de la niña y que pertenecen al acusado, pues en su momento el director de Medicina Legal, Carlos Eduardo Valdés, comentó que “no hay ninguna duda de que el material biológico encontrado en el cuerpo de la menor coincide con los análisis de laboratorio y vinculan a Rafael Uribe con la muerte y abuso de la niña”.
Se aclaró además que Rafael Uribe Noguera tomó alcohol y se drogó para despistar a las autoridades luego de cometer el crimen. La juez encargada de leer la sentencia aseguró que el delito en el que se basó la sentencia fue el de feminicidio agravado y se aumentó su pena por el delito de acceso carnal violento y el secuestro simple agravado. «Se le condena al señor Rafael Manuel Uribe Noguera de los delitos anteriormente mencionados», citó la juez encargada.
Los Samboní
Juvencio Samboní, padre de Yuliana Samboní, se presentó en los juzgados de Paloquemao para la lectura de la sentencia. Antes de iniciar con el oficio, Samboní aseguró que una sentencia corta no le haría justicia a su hija y que tampoco se la devolvería, pero que esperaba que fuera ejemplar. Juvencio Samboní viajó desde Popayán para la lectura de la sentencia y dejando a su esposa e hijo recién nacido.
La juez aseguró que esto no es una victoria y señaló que esperaba que los más de 15.000 casos de abuso sexual a menores también se resuelvan con la misma rapidez. Comentó, antes de iniciar con la lectura de la sentencia, que “hasta que la Fiscalía muestre resultados alrededor de violencia sexual y feminicidio y procurarles pronto acceso a la justicia, solo cuando la violencia contra la mujer se reconozca como de interés público, y solo cuando la sociedad exteriorice actos de tolerancia sobre la identidad de género, podremos demostrar que Yuliana no murió en vano”. Agregó que con este caso «se demostró que pueden trabajar en llave la Fiscalía y la Policía. Cuando quieren, pueden».
Los hermanos Uribe Noguera
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Por otro lado, a sus hermanos, Francisco y Catalina Uribe Noguera, les espera una investigación y juicio correspondiente por aparente ocultamiento, supresión y destrucción de pruebas en el caso. Ambos se declararon inocentes el pasado 15 de marzo en la audiencia de imputación de cargos en donde la fiscal encargada aseguró, que tras recibir ayuda de expertos del FBI para continuar adelante con la investigación, se estableció que ellos habrían borrado conversaciones de WhatsApp con el fin de favorecer a su hermano.
Asimismo, se ratificó el lunes la medida de restricción que tienen ambos para salir del país y en los próximos días podría llamar a los hermanos a juicio.
