Cadáveres tiene registrados Medicina Legal de personas que fallecieron en distintas circunstancias los cuales fueron hallados en los humedales de Bogotá.
“No podemos permitir que esto se convierta en una práctica habitual que para evadir la justicia, los delincuentes usen los humedales como botadero de cadáveres”, concejal Daniel Palacios.
Puente Aranda se convirtió en el nuevo punto de la capital en el que se encontró una bolsa de basura con las partes de un cuerpo humano. Aún no se saben a quién pertenecen, si es hombre o mujer o a qué se debió el crimen. Simplemente se registró y lo único claro por ahora es que en menos de dos meses se han encontrado otras cuatro bolsas de basura en similares circunstancias.
Estos hallazgos se suman a la denuncia que realizó el concejal por el Centro Democrático, Daniel Palacios, sobre los humedales en Bogotá que se han convertido en verdaderos cementerios. De lo corrido que va el año se han encontrado por lo menos 20 cuerpos, según datos de la Fiscalía.
Publimetro conoció que Medicina Legal ha registrado 16 cuerpos, sin identificar, de personas que murieron en distintas circunstancias. Aunque la Policía, consultada por este medio, no dio declaraciones al respecto y la Fiscalía también decidió no hablar, el concejal aseguró que en el Humedal Tibanica, Bosa, se han encontrado cinco cuerpos de sexo masculino, uno femenino, dos cuerpos no identificados, además de un mortinato (nacido muerto) y restos óseos de dos personas, para un total de once casos.
El humedal del Río Tunjuelito también encabeza la lista con cuatro cadáveres de sexo masculino. También se hallaron cuerpos en los humedales La Conejera, Juan Amarillo, El Salitre y el río Fucha, todos ellos con un cadáver. Según lo señalado por el mismo concejal, los hechos están siendo investigados por las autoridades.
El concejal pidió más acompañamiento en estas zonas de la Policía Metropolitana de Bogotá y a la Alcaldía para que se haga control sobre estas zonas de la ciudad. “No podemos permitir que esto se convierta en una práctica habitual que para evadir la justicia, los delincuentes usen los humedales como botadero de cadáveres”, señaló Palacios.
Por supuesto, algunas de las teorías que se manejan sobre estos hechos es el de una supuesta limpieza social. Aunque esto no ha sido comprobado y no se tienen pruebas que lo puedan confirmar, los habitantes de sectores cercanos no descartan la posibilidad. Pero no es el único problema grave al que se enfrenta el Gobierno Distrital y la Policía, pues estas zonas también funcionan para la venta y el consumo de drogas lo cual ha sido denunciado por la comunidad.
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