Alrededor de 1,2 millones de residentes que han pagado condenas de prisión en el estado de Florida recuperaron el derecho a votar, gracias a la aprobación el martes de una enmienda de la constitución estatal.
El texto constitucional, de 150 años de antigüedad, tendrá que ser cambiado luego de que la llamada Enmienda 4 recibiera el 65% de los votos.
Antes de eso, Florida era apenas uno de cuatro estados de la unión que automáticamente y permanentemente revocaba el derecho a sufragio de todo aquel condenado por un delito grave.
"Celebramos una de las mayores expansiones del derecho a voto en la historia de nuestra nación", escribió en un comunicado el director ejecutivo de la Unión de Libertades Civiles (ACLU), Howard Simon.
Previamente, los exconvictos de Florida tenían que esperar cinco años después de ser liberados para luego solicitar clemencia al despacho del gobernador.
Pero, desde 2011, el gobernador republicano Rick Scott sólo ha devuelto el derecho a voto a una 2.000 personas.