La tecnología no deja de sorprendernos con artilugios y sistemas que hacen nuestra vida más fácil y que incluso revolucionan la forma en que nos relacionamos como sociedad.
Pero no solo los ingenieros o científicos de hoy nos dejan boquiabiertos.
Existen objetos del pasado que todavía nos intrigan y no han podido ser descifrados pese a lo mucho que la humanidad ha avanzado en materia de conocimiento y entendimiento del mundo que nos rodea.
Hasta nuestros días han llegado bien conservadas piezas diseñadas y construidas por nuestros antepasados cuyo uso se perdió en la historia. Nadie recuerda cómo se hicieron y sus funciones continúan siendo un misterio.
1. El hierro que no se corroe
La multicultural India es el hogar de muchos misterios y obras impresionantes y uno de ellos es el Pilar de Hierro de Delhi, una columna de hierro que alcanza los siete metros de altura y que, pese a haber sido construida hace unos 1.600 años, no se ha oxidado.
El pilar pesa unas seis toneladas y es una de las curiosidades históricas que más llama la atención en el campo de la metalurgia. Formaba parte de un templo hinduista levantado durante la dinastía Maurya, el primer gran imperio que unificó India.