Cuando surgieron acusaciones de agresión sexual contra el fiscal general de Nueva York Eric Schneiderman esta semana, él las negó, argumentando que nunca tendría sexo sin consenso.
"En la privacidad de las relaciones íntimas, he sido partícipe de juegos de rol y otro tipo de actividad sexual consentida. No he abusado de nadie", le dijo a la revista The New Yorker, que publicó las acusaciones en su contra.
Cuatro mujeres dicen que Schneiderman las abofeteó en repetidas ocasiones y una dijo que insistió en que lo llamara "jefe" en situaciones no consensuadas.
Una de sus exnovias, Michelle Manning Barish, dijo: "Esto no fue, bajo ninguna circunstancia, un juego sexual que acabó mal…No di mi consentimiento a ningún abuso físico".
Fiscales de Nueva York están investigando los alegatos de estas mujeres.
No es la primera vez que un hombre acusado de abuso dice que estaba participando de manera consensuada en una relación de "sexo rudo" (en el caso de Schneiderman, mantuvo relaciones sexuales con tres de las cuatro mujeres que lo acusaron; la cuarta mujer dijo que él la golpeó luego de haberlo rechazado).