El virus de la fiebre amarilla existe en Brasil desde los tiempos coloniales.
Sin embargo, desde el año pasado, el número de casos ha ido aumentando hasta alcanzar niveles sin precedentes en los últimos 50 años.
El viernes pasado, el Ministerio de Salud de Brasil informó que en los últimos siete meses y medio 464 personas contrajeron fiebre amarilla, de las cuales 154 murieron.
Los datos fueron actualizados por última vez hace tan solo 10 días. En ese período murieron 56 persona y se confirmaron 111 casos nuevos.