En los últimos meses en el oriente de Cali, en barrios como Potrero Grandem Pizamos I, II, III o Valle Grande, se han presentado diferentes situaciones donde se observa a niños o adolescentes que supuestamente se citan para llevar a cabo peleas callejeras con piedras, machetes, cuchillos y hasta armas traumáticas o de fuego.
Luego de las constantes situaciones y de las denuncias por parte de los moradores de los barrios, desde el Concejo de Cali realizaron una propuesta a las autoridades para realizar toque de queda para niños y adolescentes en el oriente de Cali para que estas situaciones no se presenten nuevamente.
Le puede interesar: Así va la ‘Paz total’: líder social fue asesinado a disparos dentro de su vivienda en Chocó
Las propuestas fueron realizadas por la concejal Daniella Plaza del partido Colombia Renaciente y el presidente del Concejo, Carlos Andrés Arias, “hay que articular la política del gobierno porque queda claro que hoy con todo lo que tiene Bienestar Social, no logra atender a la población infantil y juvenil”.
Olmedo Meza, presidente de la Junta de Acción Comunal del barrio Unión de Vivienda Popular, indicó en una de las sesiones del Concejo que en los encuentros se reúnen menores de 12 años y hasta 300 jóvenes y las niñas son las que esconden las armas. “En la comuna 16 hay más de 100 mil habitantes con una población infantil que demanda atención permanente, formación para el trabajo, escenarios y espacios para la recreación y cultura”.
También podría leer: Dos años de la histórica sentencia: ¿cómo ha avanzado el acceso y cuáles son las principales barreras aún existentes?
La comunidad de los distintos barrios indica que cuando comienzan las peleas, las autoridades llegan hasta el lugar pero es difícil controlar la situación porque son muchos jóvenes peleando.