El Ministerio Público y la Sección de Asuntos Antinarcóticos y Aplicación de la Embajada de Estados unidos halló la presencia de elementos tóxicos en Río Felidia, un importante afluente del río Cali. Así lo confirmó la Procuraduría General de la Nación y lo denominó como una “crisis ambiental”.
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El Ministerio Público también lanzó alerta por la presencia de estas sustancias. “De acuerdo con el ente de control, las presencias de las sustancias tóxicas son consecuencia de la minería ilegal en el Parque Nacional Natural Farallones, actividades ilícitas que representan una amenaza directa para el ecosistema del parque y para la calidad del agua de seis de los siete ríos que abastecen a la ciudad, situación que ha sido reiteradamente denunciada y alertada por la procuraduría”.
“¡Emergencia en Cali! Niveles de mercurio y plomo en el Río Cali superan límites seguros. La Procuraduría enfatizó en la necesidad de una actitud de cero tolerancia con el uso de mercurio” indicó la Procuraduría a través de X.
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Estas dos sustancias tóxicas se encuentran por encima de 23 partes por millón (ppm) en el río, lo que supera la medida segura que indica la norma y la Organización Mundial de la Salud, la cual específica un límite máximo de 0,1 a 0,17 miligramos por kilogramo.
“Este monitoreo, que se realizó, se adelanta en el marco de los compromisos que se asumieron por parte de la señora procuradora general de la Nación, la doctora Margarita Cabello, en la Meza Nacional de Mercurio, que se realizó a inicios de este año. Ahí se empiezan evidenciar las situaciones por el uso indiscriminado de mercurio en actividades mineras ilegales en muchos sitios del país, entre ellos en los Farallones de Cali... Lo veníamos advirtiendo desde hace seis meses y las autoridades se hicieron las de la vista gorda. Nosotros intuíamos que por las actividades mineras ilegales en el parque Farallones había una grave afectación al río Cali”, informó Gustavo Adolfo Guerrero, procurador delegado para Asuntos Ambientales.
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La Alcaldía de Cali se pronunció
Las autoridades locales informaron que se firmó un contrato para hacer implosiones de las bocaminas que conectan con los yacimientos, para poder sellarlas.
También indicaron que aunque los niveles son muy altos, aún no representa riesgo para los habitantes en cuanto al consumo de agua, pues las partículas aún no se han captado en la cuenca donde se encuentra la bocatoma de Emcali.
