El panorama para la mujer en Cali en cuestión de desigualdades en el trabajo, ingresos laborales, sistema de cuidado y violencias basadas en género parece no mejorar luego de las alarmantes cifras que lanzó el Observatorio para la Equidad de las Mujeres, OEM.
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De acuerdo la encuesta realizada entre septiembre y octubre, las mujeres tienen menor participación en el mercado laboral, ganan menos dinero que los hombres y tienen una alta carga laboral.
En la primera infancia, de 0 a 4 años de edad, las mujeres sufren de malnutrición, bajo desarrollo cognitivo, bajo acceso a servicios de salud.
De 5 a 11 años las mujeres presentan deserción escolar, abuso, explotación, violencia, tráfico, trabajo infantil y hasta matrimonio infantil.
Embarazos adolescentes, enfermedades sexuales, prostitución, mortalidad materna, violencia doméstica, poco acceso a créditos, desempleo, carga de cuidado del hogar, violencia intrafamiliar, dependencia económica, ingresos bajos, inestables, sector informal, falta de apoyo familiar y otros factores son por los que pasan las mujeres desde sus 20 años hasta +60, de acuerdo con la Fundación WWB, el DANE y UNICEF.
De acuerdo con el Dane, de mayo a julio del 2023, 61 de cada 100 mujeres mayores de 14 años participan en el mercado laboral de Cali, mientras que la participación de los hombres de 77 de cada 100.
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Las mujeres empleadas tuvieron un ingreso promedio 19,1% menor que los hombres, o sea, que mientras los hombres ganan en promedio $1′837.622 las mujeres ganan $1′542.764 mil pesos.
Esto tiene influencia en la tasa de desempleo, pues mientras que la de la mujer se ubica en 12,4%, la del hombre es del 9%.
Por oro lado, más de la mitad de las mujeres emprendedoras de la ciudad (54 de cada 100) dedica entre 6 y 7 horas a la semana a su negocio y más de la mitad dicen tenerlo en su vivienda, de acuerdo con el OEM.
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El sistema de cuidados para las mujeres de Cali es otro aspecto en los que se enfocó la encuesta, pues 22 de cada 100 mujeres afirman que la carga de las labores del hogar recae sobre ellas.
22 de cada 100 mujeres viven con niños y niñas menores de cinco años, 11 con personas dependientes, enfermas o mayores que requieren atención y cuidado, 17 tienen limitación o discapacidad por lo que se les dificulta trabajar o estudiar y 40 se preocupó en los últimos 30 días de que se quedaran sin comida.
Entre enero y agosto de este año se presentaron 1534 casos de violencia contra las mujeres, de cada 100 casos, 82 son de mujeres.
El Observatorio de Seguridad de Cali, informó que se presentaron 50 homicidios a mujeres y 9 de ellos feminicidios. En adición a lo anterior, en agosto se han registrado 547 exámenes médicos por presunto delito sexual, mientras que 25 de cada 100 mujeres afirma haber sido manoseada, besada o tocada sin su consentimiento y en el 63% de los casos el responsable fue un desconocido.
Pero uno de los aspectos más graves es la precarización económica de las mujeres en la capital del Valle del Cauca, en donde el 44% tienen inseguridad alimentaria, el 60% reciben ingresos menores a un salario mínimo y solamente el 10( hace cotización a pensión.
“Estamos llegando a cifras menores del 20% en actividades de autocuidado y ocio, además de una acumulación de escenarios laborales, productivos y/o reproductivos. Una propuesta urgente son los sistemas distritales de cuidado que logren reconocer, redistribuir y recompensar a la mujer, la labor que hacen en sus casas”. informó Lina Buchely, directora del OEM.
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Buchely también agregó que Cali tiene un 10% más de tasa de afectación sexual de las mujeres que en otras ciudades del país. “Hay de alguna manera una emergencia muy importante de escenarios de acoso callejero en lo público, por lo tanto, debemos robustecer los programas sobre rutas de violencia basadas en género, evitando que haya revictimización o victimización secundaria, para poder romper los circuitos de violencia”.
Debido a las alarmantes cifras, en Cali se han llevado a cabo campañas para educar y concientizar a las personas.
‘Cali se pinta violeta’ o el ‘Sistema Distrital de Cuidado’ se llevaron acabo para crear conciencia y para que las mujeres se ubiquen como prioridad. Cali es la tercera ciudad del país en contar con mecanismos para fortalecer y articular en la ciudad la oferta de servicios de cuidado.