Como consecuencia del voraz incendio que se presentó en el sector de Altos de Menga, en la ciudad de Cali, el pasado 21 de septiembre, se vio afectada gran fauna y flora de la zona, pues toda la vegetación quemada se perdió y muchos animalitos quedaron con quemaduras de gravedad.
Uno de los animalitos que casi pierde la vida es una pequeña ardilla que estuvo en un hogar de paso mientras intentaban salvarle la vida.
En el marco de la campaña ‘Con la Seca no se Juega’ implementada por el equipo de Fauna Silvestre del Departamento Administrativo de Gestión del Medio Ambiente, se activo la Unidad de Atención y Rescate de Fauna Silvestre que se encontraran afectados por los incendios que se presenten en la ciudad.
“Lo que hicimos fue implementar el protocolo para la atención de fauna silvestre en situaciones de emergencias y desastres, articulados siempre con Bomberos y la Secretaría de Gestión del Riesgo, con miras a rescatar animales y prestarles primeros auxilios en el sitio para después trasladarlos al Hogar de Paso”, indicó el subdirector del DAGMA, Franklin Castillo.
La pequeña ardilla tenía quemaduras de segundo grado en falanges de miembros anteriores y posteriores y tres nuches en su cuello, tórax y costado izquierdo, por lo que las autoridades la mantuvieron con pronóstico reservado.
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Entre sus tratamientos se realizó terapia con oxígeno, antibiótico, analgésico, medicamentos antiinflamatorios y cremas cicatrizantes, además, se alojó en un topper plástico con sustrato antiadherente y fue demostrando evolución positiva y desplazamiento con mayor facilidad.
Luego de que mostrara evolución completa en espacios más amplios, se liberó en su hábitat natural para que siguiera su vida. En el Hogar de Paso del Dagma se encargan de rescatar animales para recuperarlos y posteriormente liberarlos en sus entornos naturales.
