Bogotá comenzó el 2025 con el inquietante recordatorio de que está atravesando una difícil crisis de abastecimiento de agua que está directamente relacionada con el nivel de los embalses del sistema Chingaza, de donde proviene casi la mitad del recurso hídrico de la capital. En las últimas horas, el presidente Gustavo Petro se refirió a la situación y a las lluvias que se han registrado en la ciudad en este comienzo de año.
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A través de un corto mensaje en su cuenta oficial en la red social X, el primer mandatario también arremetió contra los exalcaldes de Bogotá Enrique Peñalosa y Fernando Mazuera Villegas. A su vez, el jefe de Estado recordó que durante su paso por la Alcaldía capitalina quiso corregir varios errores que habían cometido sus antecesores, pero no lo consiguió.
“Mientras cae agua lluvia por montones en Bogotá, el embalse se queda sin agua”, empezó señalando el presidente Petro. Y agregó que la clase política tradicional quiso defender a “grandes poseedores de tierra” con el fin de urbanizar.
“El efecto de dos alcaldes similares Mazuera, fascista y Peñalosa, neoliberal, en la busqueda de aumentar negocios particulares con la tierra y los servicios, es este: la ciudad cada vez demora más en sus tiempos de viaje, y ahora cada familia debe ir al baño con balde”, sostuvo el primer mandatario.
El nivel de los embalses del sistema Chingaza ha caído
En efecto, las cifras muestran que el nivel de los embalses del sistema Chingaza lleva varios días a la baja. Así lo dejó entrever el reporte más reciente entregado por la Alcaldía de Bogotá.
“El consumo de agua en Bogotá durante el 3 de enero fue de 15,52 m³/s. El nivel de los embalses del Sistema Chingaza se encuentra en 46,25 %”, indicó el Distrito en su cuenta de X.
En la práctica, hubo una caída de 0,04 puntos porcentuales en el nivel de los embalses entre el 2 y el 3 de enero. Pese a todo, el decrecimiento de estos cuerpos de agua se ha mitigado en las últimas horas.
Vale decir que, según las proyecciones de la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá, se espera que estos primeros tres meses del año estén marcados por el tiempo seco, tal y como ocurre cada año.
