Una romántica escapada a la costa se transformó en una pesadilla para Edward Fernando Casallas Iguabita y Kelyn Angélica Guiza Torres, una pareja de Bogotá que ahora se enfrenta a graves heridas tras un incendio devastador. El incidente, que se produjo en su apartamento alquilado en El Rodadero, ha dejado a ambos en estado crítico en una clínica de Barranquilla.
PUBLICIDAD
Le puede interesar: Crece la inseguridad en Bogotá: banda de ladrones de camionetas de alta gama deja una víctima fatal
Todo comenzó cuando la pareja decidió disfrutar de unas vacaciones en Santa Marta. Alquilando un apartamento a través de una plataforma digital, su intención era relajarse y desconectar de la rutina diaria. Sin embargo, lo que debió ser un tiempo de disfrute se tornó en un accidente trágico que ha impactado no solo sus vidas, sino también a sus familias y amigos.
El martes por la mañana, las autoridades revelaron que la causa del incendio fue una válvula de gas que quedó abierta durante la noche. Al intentar encender la estufa para el desayuno, se produjo una explosión que desencadenó un incendio que rápidamente se expandió por el inmueble.
Le puede interesar: Buscan que amas de casa en Colombia reciban la mitad de la pensión de sus parejas: ¿cómo funcionaría?
Con el fuego consumiendo rápidamente el apartamento y sin una salida viable, Edward tomó la difícil decisión de saltar por la ventana junto a Kelyn. Ayudó a su novia a salir primero, pero sufrió severas lesiones al caer al pavimento. Ambos resultaron con quemaduras graves y múltiples fracturas, lo que llevó a un traslado urgente a un centro médico en Santa Marta.
Inicialmente, ambos fueron ingresados en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), pero la gravedad de sus heridas requirió atención especializada. Mientras Kelyn fue rápidamente trasladada a una clínica en Barranquilla, Edward enfrentó una espera angustiosa, lo que empeoró su condición.
PUBLICIDAD
Blanca Iguabita, madre de Edward, no pudo contener su preocupación. “En Santa Marta lo han atendido bien, pero requiere un tratamiento especial y aquí no disponen de los recursos necesarios. Estamos desesperados esperando su remisión”. Su angustia se hizo realidad cuando finalmente, la autorización para trasladar a Edward a Barranquilla fue aprobada, y ahora está recibiendo la atención médica necesaria.
El estado de salud de ambos jóvenes sigue siendo crítico, y sus familias están en un estado de constante preocupación. Blanca, con la voz entrecortada, reflexionó sobre la situación: “Son dos jóvenes de 28 años con muchos sueños por delante. Aún no podemos creer cómo ocurrió todo esto cuando solo querían disfrutar de unas vacaciones felices”.
Las autoridades locales han iniciado una investigación sobre el incidente, preliminarmente clasificado como un accidente doméstico. Se está examinando la acumulación de gas en el apartamento como posible causa del desastre. Mientras tanto, las familias de Edward y Kelyn enfrentan el duro proceso de recuperación emocional y física tras esta trágica experiencia.