La Policía Metropolitana de Bogotá, en coordinación con la Seccional de Investigación Criminal (SIJIN) y la Fiscalía General de la Nación, ha llevado a cabo una importante operación para desarticular una red dedicada a la fabricación, almacenamiento y comercialización de medicamentos adulterados y falsificados en la capital colombiana. Esta acción conjunta ha resultado en la materialización de 20 medidas cautelares de extinción de dominio y una captura por el delito de corrupción de alimentos.
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La operación, realizada en colaboración con la Dirección de Extinción del Derecho al Dominio, ha permitido afectar las finanzas de personas vinculadas con la fabricación y venta de medicamentos ilegales. Se ha evidenciado que los bienes inmuebles y establecimientos comerciales eran utilizados como puntos de venta de estos productos médicos fraudulentos en ocho localidades de Bogotá.
Las medidas cautelares de embargo, secuestro y suspensión del poder dispositivo han afectado directamente las finanzas de estos criminales, quienes obtenían una renta mensual aproximada de nueve millones de pesos a través de sus actividades ilícitas.
Productos incautados:
Durante la operación, se incautaron una amplia variedad de productos farmacéuticos y medicamentos sin registro INVIMA, así como materiales utilizados en su fabricación. Entre los elementos decomisados se encuentran:
- Ampollas inyectables.
- Jarabes.
- Tabletas.
- Cremas.
- Blíster.
- Granulados vencidos.
- Muestras médicas y fármacos de uso institucional.
También se encontraron empaques de alimentos y bebidas naturales, envases sin número de funda, etiquetas y cajas de productos.
Hallazgos adicionales:
En uno de los inmuebles utilizados por la red criminal, se encontraron herramientas y maquinaria utilizadas en la fabricación y empaquetado de los medicamentos, así como matrices metálicas para la elaboración de tabletas y un horno artesanal para el secado de la materia prima. Estos bienes incautados tienen un valor estimado en diez mil millones de pesos y los responsables enfrentan cargos por el delito de corrupción de alimentos, que conlleva una pena de entre 8 y 16 años de cárcel.
La Policía Metropolitana de Bogotá hace un llamado a los ciudadanos para que eviten comprar medicamentos y material médico en lugares no autorizados, ya que representan un riesgo para la salud y la vida.