Si bien la intención de la Alcaldía de Bogotá era que el racionamiento de agua lograra bajar el consumo en la capital a 15 metros cúbicos por segundo, esta meta todavía no se ha conseguido. El reporte más reciente entregado por el alcalde Mayor, Carlos Fernando Galán, muestra que el domingo pasado el consumo llegó a 16,01 metros cúbicos. Esto muestra que las restricciones que se venían aplicando hasta ahora no han sido suficientes.
En una rueda de prensa que se llevó a cabo en la mañana de ayer, el alcalde Galán les informó a los medios de comunicación y a los ciudadanos un total de siete medidas que se empezarán a implementar con el fin de que la capital cuide mejor sus recursos hídricos.
Para empezar, citó una resolución de la Comisión de Regulación de Agua Potable y Saneamiento Básico (CRA) en la cual se basará la Empresa de Acueducto de Bogotá (Eaab) para imponer un “cargo adicional” por metro cúbico de agua consumido en exceso para aquellos hogares que usen más de 22 metros cúbicos al mes. Como el recibo del agua en la capital llega cada dos meses, esto significa que los cobros adicionales aplicarían para los lugares que consuman más de 44 metros cúbicos de forma bimestral.
Vale decir, sin embargo, que el alcalde explicó que esta medida no cobijará a algunos recintos: inquilinatos donde se presten servicios especiales, como los que se dedican al cuidado de adultos mayores, y hogares del ICBF donde cuidan a niños de distintas edades.
“Adicionalmente, le solicitaremos a la CRA revisar algunos de los parámetros de aplicación de esta medida, con el objetivo de hacerla más estricta y podamos, por ese vía, incentivar un menor consumo de agua”, detalló el alcalde Galán a través de su cuenta de X.
También informó que le solicitaron a la Lonja de Propiedad Raíz de Bogotá y a la Asociación Colombiana de Propiedad Horizontal que apoyen las medidas para disminuir el consumo de agua. Esto se debe a que en muchos edificios de conjuntos residenciales de la ciudad cuentan con tanques de uso continuo que evitan que los ciudadanos sientan las dificultades del racionamiento y, por lo tanto, sus hábitos de consumo no tienen un cambio sustancial.
En cuarto lugar, Galán advirtió que se implementarán “medidas policivas” contra aquellos que sean sorprendidos haciendo un mal uso del agua. Habilitaron el correo juntosporelagua@gobiernobogota.gov.co y les pidieron a los ciudadanos denunciar cualquier irregularidad en las redes sociales de la Secretaría de Gobierno.
“Seguiremos teniendo espacios de diálogo con expertos para evaluar las medidas adoptadas, así como otras, con el objetivo de lograr cambios en el comportamiento de la ciudadanía, el sector privado y el público, que nos permitan optimizar el consumo de agua, tanto en esta coyuntura como a mediano y largo plazo”, detalló Galán.
A su vez, sostuvo que la propia administración distrital ya ha implementado medidas para reducir el consumo de agua en el sistema de transporte público y en otros ámbitos.
“Por último, el acompañamiento a edificaciones indispensables, como colegios y hospitales se mantendrá tal como ha venido funcionando, de manera que, por ninguna circunstancia, se queden sin agua”, agregó el mandatario capitalino.
Las críticas de la oposición
Las decisiones que ha tomado la Alcaldía de Bogotá para hacerle frente a esta emergencia han generado dudas en distintos sectores que advierten que no hubo una política preventiva efectiva para encarar la escasez de agua que hoy preocupa a la capital.
De hecho, el Pacto Histórico, la coalición que integra la oposición a la Alcaldía de Galán en el Concejo de Bogotá, le envió una carta al alcalde mayor esbozando algunas propuestas de cara a lo que se viene y señalando que muchas de las decisiones que ha tomado debieron ser implementadas antes.
“Acompañamos las primeras medidas implementadas frente a la restricción del uso del agua, consideramos que si bien estas se debieron tomar a partir del segundo semestre del 2023, sabemos que son las adecuadas”, reza la misiva.
También indicaron que debe contemplarse la “suspensión temporal de actividades que generen gran consumo de agua que no sea de vital importancia”. Esto, explicaron, podría aplicarse en clubes y lugares de alta concentración poblacional.
Heidy Sánchez-Barreto, concejala del Pacto Histórico, criticó con fuerza la gestión del alcalde Galán en relación con el tema del agua y advirtió que se trata de una “improvisación”.
“Yo realmente no siento que el alcalde sepa de verdad cómo darle un manejo adecuado a esta situación”, le señaló Sánchez-Barreto a PUBLIMETRO. “Él tiene que sacar medidas a corto, mediano y largo plazo. Es que no estamos hablando de cualquier situación. Los temas del fenómeno de El Niño y el cambio climático son reales. El alcalde tiene que presentar un cambio drástico en cómo nos relacionamos con el medioambiente en Bogotá”, agregó.
También sostuvo que debe haber un trabajo coordinado con los municipios cercanos a la capital, pues también les compete dictar políticas sostenibles para manejar mejor el acceso al agua por parte de sus ciudadanos.
Por último, señaló que es “desacertado” que se empiecen a implementar cobros adicionales por consumo, pues es una medida que podría afectar a las comunidades más vulnerables de la capital.
“Me parece que el alcalde no conoce la realidad de la ciudad de Bogotá, sobre todo de gente de las capas pobres y populares de la ciudad, donde no viven tres personas en una sola unidad habitacional, sino un número mayor”, concluyó la concejala.