La violencia en Bogotá ha escalado debido a disputas territoriales entre grupos como las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC) y el ‘Tren de Aragua’, según lo alerta la Defensoría del Pueblo en su reciente declaración. Esta situación, documentada en la Alerta Temprana 004 del 2024, se ha extendido a nuevas áreas urbanas de la ciudad, incluyendo Antonio Nariño, Tunjuelito, Chapinero, Teusaquillo y Barrios Unidos, además de los distritos previamente afectados como Los Mártires, Santa Fe, Puente Aranda y La Candelaria.
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La Defensoría resalta la necesidad de que las autoridades civiles y los cuerpos de seguridad implementen medidas de prevención, atención y protección para la diversa población de las 22 Unidades de Planeamiento Zonal (UPZ), donde residen aproximadamente 954.000 personas, quienes se encuentran en riesgo debido a la escalada de la violencia.
Carlos Camargo Assis, Defensor del Pueblo, advierte sobre las diferentes formas de violencia selectiva e indiscriminada que afectan a los habitantes de estas zonas, incluyendo amenazas de muerte, homicidios selectivos, desapariciones forzadas y extorsiones. Además, se destaca el control ejercido por grupos criminales sobre actividades como la trata y explotación sexual, la mendicidad forzada y el reclutamiento de jóvenes para actividades ilícitas.
Las acciones criminales son llevadas a cabo por grupos aliados tanto de las AGC como del ‘Tren de Aragua’. En este contexto, se resalta el riesgo específico para poblaciones socialmente estigmatizadas, como recicladores, personas dedicadas a la prostitución, migrantes venezolanos y consumidores de drogas.
“El ‘Tren de Aragua’ financia a ‘Los Satanás’, que está en guerra por el territorio contra grupos criminales vinculados a las AGC, como la ‘Oficina de San Andresito’ y ‘Los Boyacos’, entre otras estructuras locales, como ‘Los Camilos’, ‘Los Costeños’, ‘Los Paisas’ y ‘Los Pereiranos’”, enfatizó Carlos Camargo Assis.
Bogotá vive su propio conflicto interno, continúa el Defensor, “que, como en otras regiones, está permeado por el narcotráfico, por eso el llamado urgente es a que las variadas formas de violencia no avancen a otras zonas de la capital de los colombianos, pero también, a que sean contenidas y, en el mejor de los casos, anuladas”.
La Defensoría hace un llamado urgente a las autoridades para implementar medidas efectivas que protejan a la población en riesgo en estas áreas afectadas por la violencia, con el fin de prevenir desplazamientos forzados y garantizar la seguridad de todos los residentes de Bogotá.
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Carlos Fernando Galán propone medidas de seguridad
Tras enterarse de la alerta temprana emitida por la Defensoría del Pueblo sobre la disputa de territorios por parte de grupos criminales en algunas áreas de Bogotá, el alcalde Mayor, Carlos Fernando Galán, convocó una reunión con los principales organismos de seguridad y justicia de la ciudad para analizar la situación.
Durante la reunión, Galán explicó que el propósito era entender la alerta en el contexto de la ciudad y definir aspectos clave, como la disposición para analizar los elementos incorporados en la alerta, la articulación interinstitucional y el desarrollo de una estrategia de seguridad y prevención.
El mandatario afirmó que la alerta temprana no indica una amenaza inminente, sino que es estructural y preventiva, derivada de un análisis de la criminalidad en Bogotá durante los últimos cuatro años, con especial atención en los últimos ocho meses. Destacó que, aunque no se han registrado masacres en la ciudad en los últimos meses y los homicidios han disminuido en comparación con 2023, es crucial entender el contexto de la alerta y tomar medidas para evitar que las situaciones identificadas por la Defensoría se materialicen.
Así mismo, Galán destacó que, en conjunto, la Policía Metropolitana y la Fiscalía General de la Nación, se viene trabajando efectivamente en el esclarecimiento de hechos delictivos en la ciudad. “Para la Administración Distrital es muy importante conocer el contexto de esta alerta, entender que se trata de un elemento preventivo que nos lleva a tomar decisiones para lograr que las cosas que están en la alerta no se materialicen. No se trata de una alerta de inminencia de situaciones que puedan ocurrir en Bogotá”, puntualizó el mandatario.
En la reunión participaron el secretario de Seguridad, Convivencia y Justicia, César Restrepo; el comandante de la Policía de Bogotá, general José Daniel Gualdrón; el comandante de la Brigada 13 del Ejército Nacional, general Rodolfo Morales; la directora seccional de Fiscalías de Bogotá, Leonor Merchán, y representantes de la Defensoría del Pueblo.