El presidente Gustavo Petro habría requerido indemnización para él y su familia por seguimientos y persecución pero podría estar a nada de caerse según la respuesta de las entidades encargadas.
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De acuerdo con la defensa del presidente Petro, la persecución no habría terminado con la liquidación del DAS en 2011, sino que fue hasta el año 2020, con reportajes periodísticos y con información de una inspección de la Procuraduría y un informe de la Corte Suprema de Justicia.
La revista Semana reveló los detalles del fallo que emitió el Tribunal Administrativo de Cundinamarca, donde “se observa una persecución permanente y continúa hacía el proyecto político del senador Gustavo Petro desde los años setenta”, indicó el abogado Óscar Eduardo Ortiz.
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Esto es por la respuesta de la Corte Suprema de Justicia que emitió en el año 2020 en el que se advierte que el nombre del presidente Gustavo Petro, “aparece relacionado como objeto de análisis o perfilamiento dentro de las evidencias que fueron recogidas en las diligencias de allanamiento en una unidad militar en Facatativá”.
Ortiz incluso cuestiona el proceder de la Procuraduría, “nos llama la atención que la Procuraduría no se haya pronunciado en este proceso. Esta situación de origen romano creada para defender el pueblo ante los excesos del emperador en épocas del imperio, hoy brilla por su ausencia en Colombia para pronunciarse por los delitos cometidos por este concierto para delinquir”.
La demanda de Petro también es a favor de casi toda su familia, menos de sus dos hijos llamados Nicolás, pero sí su abuela, bisabuela, hija Adriana con sus hijos, hermano Juan Fernando Petro y por su puesto su núcleo principal, esposa e hijos.
