El pasado jueves 16 de marzo, la ministra de Trabajo, Gloria Inés Ramírez, radicó ante el Congreso de la República, la Reforma Laboral que pretende priorizar la contratación a término indefinido; Pago del 100% del recargo dominical, actualmente es el 75 %; se fortalece la protección y promoción del derecho de asociación sindical; se recupera y diferencia la jornada diurna y nocturna de 6 a.m. a 6 p.m; se elimina la violencia y el acoso en el mundo laboral; se protege el trabajo en plataformas digitales o de reparto, entre otros.
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Precisamente este último punto clave ha sido objeto de discusión, pues según el gremio de las Aplicaciones e Innovación, Alianza In, el texto destruiría más de 80 mil trabajos de domiciliarios, como Rappi.
“Por la actual situación económica y por la inflación, entiendo que muchos clientes estén insatisfechos porque Rappi se ha vuelto más costoso, pero con la reforma tendríamos que cobrar 18.000 pesos por un domicilio y eso restringiría el servicio a unos pocos, destruyendo el modelo de negocio y dejando sin ingresos a muchas personas”, señaló, el director ejecutivo de esta aplicación, Simón Borrero, en entrevista con Revista Semana.
Congresista Polo Polo salió a las calles para apoyar protestas de Rappitenderos
Durante este martes, un grupo domiciliarios de Rappi llegó hasta el Congreso de la República para protestar en contra de la Reforma laboral. Durante la protesta, el congresista, Miguel Polo Polo llegó para apoyarlos y les prometió “que voy a luchar por sus derechos”.
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Afirmación que generó apoyo entre algunos trabajadores. “No a la Reforma. Tenemos una protesta contra el gobierno. No queremos ser contratados. Exigimos que nos respeten nuestra independencia laboral”, argumentó uno de los protestantes. “Estoy con ustedes”, le respondió Polo Polo.
