Barranquilla

En imágenes: mujeres picoteras y sonideras de México y Colombia asisten a intercambio cultural en Barranquilla

Mujeres picoteras y sonideras de México y Colombia se encuentran en Barranquilla para un intercambio cultural.

Barranquilla se convirtió en el epicentro de un intercambio cultural vibrante con la llegada de Amplificadas, un proyecto transformador que buscó destacar y fortalecer el rol de las mujeres en las culturas patrimoniales de la cultura Sonidera de México, la cultura Picotera de Colombia y el Sound System. Del 26 al 28 de febrero, se llevaron a cabo diversas actividades que reunieron a artistas, gestoras culturales y comunidades locales para compartir saberes y experiencias.

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“Las mujeres hemos sido el corazón de las culturas sonideras, picoteras y sound system, pero nuestro papel ha sido invisibilizado por años. Con Amplificadas, queremos recuperar esos espacios, levantar nuestras voces y demostrar que la música es un territorio de resistencia, identidad y transformación social”, afirmó a PUBLIMETRO Diana León, directora de Amplificadas y CEO de la Fundación La Comadre.

¿Qué es Amplificadas?

Amplificadas es una plataforma de encuentro y creación colectiva que resaltó el papel de las mujeres en culturas patrimoniales como la cultura Sonidera de México, la cultura Picotera de Colombia y el Sound System. El proyecto fue liderado por tres mujeres: Diana León, directora y CEO de la Fundación La Comadre en Colombia; Mariana Delgado, Investigadora, gestora y productora independiente de la colectiva Musas Sonideras de México y directora de Amplificadas; Marisol Mendoza, fundadora de la colectiva Musas Sonideras de México y Layla Sánchez Kury, representante legal de Musas Sonideras.

A través de conversatorios, talleres y tomas culturales, el proyecto exploró la riqueza de tres tradiciones musicales de gran impacto social:

La cultura Sonidera de México: Con más de 60 años de historia, la cultura sonidera se desarrolló principalmente en el espacio público, donde el baile sonidero transformó plazas y calles en escenarios de construcción social. Más que música, es un fenómeno cultural que entrelaza comercio, comunicación e identidad. Aunque durante la pandemia su presencia se trasladó temporalmente a internet, su esencia seguía estando en la interacción en vivo, con potentes sistemas de sonido que amplificaban no solo la música, sino también la comunidad y la resistencia.

  1. La cultura Picotera - Champetera de Colombia: En el Caribe colombiano, el “picó” se convirtió en un símbolo de identidad cultural. Desde sus inicios en los años 50, la música y el baile picotero evolucionaron, incorporando nuevos géneros como la champeta. A pesar de los desafíos, la cultura picotera continuó siendo una manifestación de resistencia y creatividad, adaptándose a nuevas formas y espacios sin perder su esencia.
  1. El Sound System: Nacida en Jamaica en los años 50, la cultura sound system se expandió globalmente como una herramienta clave para la difusión del reggae, el dancehall y otros géneros. Basada en poderosos sistemas de sonido artesanales, transformaba el espacio público en una pista de baile, promoviendo la música, la comunidad y la resistencia cultural. Su impacto fue fundamental en movimientos musicales y sociales en América Latina, Europa y África.

La cultura sonidera de Jamaica y el sonidero y el pico son manifestaciones culturales primas que nacieron de la necesidad de expresión del sonido comunitario y alternativo.

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