Este sábado 7 de diciembre, Nicolás Petro, hijo del presidente Gustavo Petro, denunció recibir amenazas en contra de su bebé y familia a través de redes sociales. En un mensaje compartido, expresó: “Hemos venido recibiendo amenazas, lo peor, en contra de nuestro bebé. Confiamos en la justicia y las instituciones de Colombia. Gracias a quienes nos envían mensajes de aliento en estos momentos difíciles. Nuestra prioridad es la seguridad de nuestro bebé”.
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Entre las intimidaciones más alarmantes está un mensaje que decía: “Ojalá maten a tu hijo y tú mueras”. Estas amenazas llegan en un momento crucial para Nicolás Petro, cuya defensa debe decidir si busca un acuerdo con la Fiscalía o enfrenta un juicio por lavado de activos y enriquecimiento ilícito.
Un informe forense elaborado por la Fiscalía y que dio a conocer la revista Semana recopiló evidencia extraída del celular de Nicolás Petro, documentando una serie de amenazas. Este informe, que incluye más de 80 páginas de datos, revela mensajes dirigidos también a Laura Ojeda, pareja de Petro y madre de su hijo. Uno de ellos decía: “Algún día morirán Laura Ojeda y su hijo. Una persona menos en el país sería una felicidad”.
A pesar de que el autor de estas intimidaciones está identificado, no se conocen avances significativos por parte de la Fiscalía o las autoridades locales para capturarlo. Tanto Nicolás Petro como Laura Ojeda han puesto sus dispositivos a disposición de los investigadores para respaldar la denuncia.
Nicolás Petro denuncia amenazas contra su bebé y familia mientras avanza su proceso judicial
Estas amenazas coinciden con el contexto judicial de Nicolás Petro, quien recientemente cambió de abogado y enfrenta una nueva etapa en su proceso. Hugo Carbonó, juez encargado en Barranquilla, ha advertido que no permitirá más aplazamientos, lo que podría acelerar el desarrollo del caso.
La defensa de Nicolás Petro solicitó medidas urgentes para proteger la seguridad de su familia y pidió evitar que las intimidaciones se conviertan en un factor de riesgo adicional, apelando al respeto por la dignidad y la vida de los involucrados.
