La empresa Air-e anunció que está en conversaciones con el Gobierno Nacional sobre su inminente crisis financiera, la cual podría afectar la prestación del servicio eléctrico en el Caribe colombiano. En una carta dirigida al presidente Gustavo Petro, la compañía reveló que sus deudas ascienden a 1.8 billones de pesos, correspondientes a facturación pendiente, opción tarifaria y subsidios para estratos 1, 2 y 3.
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El representante jurídico de Air-e, Jaime Lombana, destacó la urgencia de una intervención gubernamental, advirtiendo que la empresa solo podría operar entre cuatro y cinco días más sin ayuda. Lombana describió la situación como “crónica de una crisis financiera anunciada”, con deudas acumuladas de 1.7 billones de pesos y créditos por cobrar de 1.8 billones de pesos.
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El alto costo de la energía ha agravado la crisis. Según Lombana, el precio del kilovatio hora ha aumentado de 120 a 720 pesos, haciendo insostenible la situación financiera de la empresa. Lombana instó a imponer límites a los generadores de energía para controlar los costos.
En respuesta a la crisis, Norman Alarcón, vocero de la Liga de Usuarios de Servicios Domiciliarios, sugirió realizar una auditoría forense a Air-e para esclarecer su estado financiero real. “Es necesario un estudio en profundidad de todos los aspectos contables, económicos y financieros de la empresa”, afirmó Alarcón, subrayando que quedan muchas dudas sobre la gestión de los recursos recibidos y la situación financiera actual de Air-e.
Por su parte, el ministro de Minas y Energía, Andrés Camacho, anunció que la Comisión de Regulación de Energía y Gas (Creg) dio un concepto favorable para la intervención de Air-e. Según Camacho, esta decisión responde a la responsabilidad del Gobierno Nacional de garantizar la prestación del servicio eléctrico en la región Caribe.
El ministro también mencionó que, aunque se han intentado aplicar normativas para regular el sector, no ha sido suficiente. En este contexto, el ministro indicó que se tomarán medidas más contundentes para evitar un posible apagón.
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Por otro lado, la Superintendencia de Servicios Públicos está investigando a Air-e por presuntas irregularidades en un contrato de comercialización de energía.
