El 20 de enero marca el inicio de festividades en muchas localidades de la Costa Caribe, aunque lamentablemente, numerosas celebraciones culminan con eventos violentos, como se evidenció el pasado fin de semana en el departamento de Bolívar.
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En el municipio de San Sebastián de Morales, al sur de Bolívar, una masacre ocurrida en la madrugada del domingo 21 de enero empañó las festividades. Durante un concierto del cantante vallenato Mono Zabaleta, hombres armados abrieron fuego indiscriminadamente entre la multitud, cobrando la vida de una mujer, un hombre y un menor de edad de la misma familia.
Mono Zabaleta detiene concierto por masacre en Morales
A las 2:40 de la madrugada, en pleno desarrollo de las ferias y fiestas del municipio, el ataque armado tuvo lugar durante el concierto en la plaza principal. Tres jóvenes perdieron la vida por disparos, generando caos entre los presentes.
“¿Qué pasó?” preguntó Zabaleta. “¿Quiero saber qué pasa?, esto sí es grave. Qué venga el alcalde”, expresó el artista e incluso pidió tocar la última canción, pero la situación era urgente. “Lo que pasó hoy aquí fue muy grave. Alguien que sea responsable aquí”.
Finalmente, se presentó el secretario de Gobierno, quién le pidió al cantante detener la presentación.
Después del ataque, los agresores huyeron entre la multitud. Los asistentes brindaron ayuda a los heridos, llamaron a la Policía y las unidades policiales trasladaron a las víctimas a un centro médico cercano. Sin embargo, al llegar, las víctimas ya no presentaban signos vitales.
Las víctimas fueron identificadas como Bridys Vanina Orozco Muñoz de 29 años, originaria de Barranquilla; Yesid Beleño Torres, de 22 años; y Brayan Rodríguez Villafañe, un menor de 15 años. Al parecer, todos participaban en las festividades patronales del municipio.
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Este incidente se suma a otro sucedido la misma madrugada en El Copey, Cesar, donde dos hombres ingresaron a una vivienda y dispararon a quienes se encontraban allí.
Hasta el momento, no hay información sobre los responsables de esta masacre. Después del hecho el alcalde decretó una semana de luto por las víctimas del ataque.
