La generación engañada
Por Melquisedec Torres
La impúdica jueza Mirtha Patricia
Por Melquisedec Torres
Ministro, no ceda
Por Melquisedec Torres
Los fanáticos de la evacuación
Por Melquisedec Torres
La tutela surrealista
Por Melquisedec Torres
Bogotá, sin ley ni alcaldesa
Por Melquisedec Torres
Las mentiras de la estética mortal
Por Melquisedec Torres
Condenados a más de 100 años de delfines
Por Melquisedec Torres
Uribe, sin coraza
Por Melquisedec Torres