Hoy les comparto esta extensa entrevista con José Pékerman. La entrevista que nunca dio a la prensa colombiana. Son 10 preguntas en las que habla de todos los temas sin pelos en la lengua. Esta entrevista es producto de mi imaginación. No es real. Cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia. Comenzamos:
1. Profesor Pékerman, antes que nada, agradecerle por aceptar esta entrevista. Mi primera pregunta es: ¿Por qué hubo tanto hermetismo en la Selección Colombia cuando usted fue el director técnico?
- Cuando nosotros (mi cuerpo técnico y yo) llegamos a la Selección Colombia entendimos la importancia de acabar con costumbres que eran nocivas para el entorno de la selección. Le pongo un ejemplo: en el Mundial de USA 94 una de las razones del estruendoso fracaso de la Selección Colombia fue precisamente esa nociva convivencia de los periodistas con el cuerpo técnico y los jugadores de la selección. Los periodistas se hospedaban en el mismo hotel de la selección, compartían ascensores, incluso se hacían entrevistas en las habitaciones de los jugadores. Y ni hablar del cuerpo técnico que tenía línea directa con algunos periodistas. No pudo existir un ambiente más tóxico y poco profesional para un equipo de fútbol en una competencia de tan alto nivel. Esa fue una de las razones del estrepitoso fracaso de aquella brillante selección. Nosotros entendimos que eso tenía que cambiar, por el bien de todos, por el sano desarrollo tanto de nuestro trabajo como del trabajo de los periodistas. Y fue lo que hicimos.
2. Profesor, usted es un gran conocedor del fútbol colombiano y de su historia. ¿Qué papel considera que tiene José Pékerman en la historia de nuestro balompié?
- Le agradezco la pregunta. Con el mayor respeto le digo lo que opino. De manera humilde considero que soy un eslabón más en el proceso evolutivo de la selección. El primer gran técnico que tuvo Colombia se llama Gabriel Ochoa Uribe. Fue el primero que quiso cambiar el estatus del futbolista colombiano. Él fue un adelantado para su época. Él quiso convertir al futbolista colombiano en un profesional a carta cabal. Antes de él, el futbolista colombiano tenía fama de borracho y de fiestero. De poco profesional. El Médico Ochoa puso el primer grano en este proceso evolutivo del fútbol colombiano. El segundo gran técnico se llama Francisco Maturana. Él logró la verdadera revolución del balompié colombiano. Le dio una identidad futbolística, le exigió al futbolista más profesionalismo, quiso la revolución integral: el futbolista como profesional y como ser humano. Hizo un proceso maravilloso, con él Colombia logró por primera vez en toda su historia salir del ostracismo internacional al cual siempre perteneció. Y, en mi humilde concepto, José Pékerman fue el tercer gran técnico en la historia del fútbol colombiano. Llegamos en un momento en que el futbolista colombiano ya se exportaba al exterior en una pequeña escala. Hicimos un trabajo a nivel institucional (lo que tiene que ver con el profesionalismo en esa relación con los periodistas), dejamos las bases de lo que hoy es la gran sede de nivel internacional que se acaba de inaugurar en Barranquilla. Y a nivel futbolístico aportamos otra manera de dirigir. Acorde a nuestra época. Cambiamos un modelo de trabajo basado en el entrenamiento de lunes a viernes (algo obsoleto para una selección nacional) por un modelo de trabajo basado en el análisis de la data y la utilización de softwares especializados. Gracias a los éxitos logrados en los 2 mundiales, pusimos un grano de arena en el proceso de exportación de los futbolistas colombianos al exterior. Nunca antes se exportaron tantos futbolistas como durante nuestro proceso. Logramos ganar 6 partidos en 2 mundiales y alcanzamos el mayor logro histórico de Colombia en una Copa del Mundo: cuartos de final en el Mundial de Brasil 2014. Por estas razones considero, de manera humilde y respetuosa, que José Pékerman es el 3er técnico más importante en la historia del fútbol colombiano.
3. ¿Qué opinión tiene del periodismo deportivo en Colombia?
- Creo que felizmente está pasando por un recambio. La nueva generación de periodistas deportivos es más profesional que la anterior. La generación anterior, en donde brillaron Carlos Vélez e Iván Mejía, era una generación que ganaba rating gracias a la generación de odio y a prácticas poco profesionales como la ya mencionada respecto a su injerencia en la Selección Colombia. Dentro de la nueva generación de periodistas destaco a los señores Antonio Casale, Nicolás Samper, Alejandro Pino y Guillermo Arango, entre otros. Ellos hacen un trabajo profesional y son, antes que nada, buenos seres humamos. Este no es un detalle menor. También están los de la escuela del señor Carlos Vélez, como son Juan Cadavid, Jorge Bermúdez y también la señorita Andrea Guerrero. Esta última, aunque mucha gente no la soporta, aparece en cuanto programa radial o televiso existe. Asistió a un taller en Miami de Tony Robbins. Su éxito profesional es innegable. Estos periodistas formados por Carlos Vélez tienen rigor profesional y ya no tienen las feas costumbres de su mentor. En la prensa escrita el principal es Alejandro Pino, uno de los pocos periodistas que ha investigado y denunciado procesos de corrupción en el fútbol, algo que habla muy bien de su carácter y su ética profesional. Dentro de los columnistas o blogueros están Nicolás Samper, Felipe Valderrama y el famoso Panza Videla. Le recuerdo que este pequeño análisis es personal y pude haber dejado a nombres importantes por fuera. También le puedo decir que, en este medio, como en cualquier profesión, hay varios personajes que no deberían estar donde están.
4. Profesor Pékerman, ahora sí hablemos de la Selección. ¿A qué se debe el éxito que logró en los 2 mundiales de 2014 y 2018?
- Primero que todo, debo nombrar a los miembros de mi equipo de trabajo. Fue un equipo de élite, con los mejores hombres. Mi asistente técnico fue Néstor Lorenzo, un hombre con vasta experiencia como jugador y como asistente técnico. Un hombre con 4 mundiales encima. Pablo Garabello, un experto en formación de jugadores. Trabajó en las divisiones menores de River Plate. Eduardo Urtasún, el preparador físico. Urtasún entrenó cracks como Tévez, Messi, Crespo, Sorín y Riquelme, entre otros. Patricio Camps, preparador de delanteros. Un tipo que con Vélez Sarsfield ganó una Copa Libertadores, una Copa Interamericana, una Copa Sudamericana y una Recopa. Eduardo Niño, el preparador de arqueros, un excelente profesional y un ser humano extraordinario. Además de otros miembros del equipo que se dedicaban a analizar a todos los jugadores colombianos en las diferentes ligas del mundo y al análisis de data gracias a softwares especializados. El éxito nuestro tuvo la base en este equipo de lujo que conformaba el cuerpo técnico. No era solamente José Pékerman, era toda una serie de profesionales del más alto nivel.
Lo segundo para nombrar es que gracias al trabajo sicológico logramos sacar el máximo potencial de cada jugador. Potenciamos sus fortalezas y disminuimos sus debilidades. Hicimos que el colectivo estuviera por encima de las individualidades y que fuera el colectivo el que potenciara esas individualidades y no al contrario.
Lo tercero es que gracias a la estrategia y planificación minuciosa de cada partido logramos esas victorias tan importantes. Tu no ganas 6 partidos en un Mundial si no es por una planificación ultra detallada de cada juego y de cada rival. Pongo un ejemplo: antes del Mundial de Brasil 2014 todo el mundo estaba muy preocupado porque no podíamos contar con nuestro goleador Falcao. ¿Cómo lo solucionamos? Gracias a la estrategia nos ideamos un “factor sorpresa” que fue la inclusión de James Rodríguez como falso nueve. Fue la gran revelación de la competencia y goleador, por primera vez en la historia del fútbol colombiano, del Mundial.
En Rusia, como los rivales ya conocían a James, creamos -gracias a la estrategia- otro “factor sorpresa”: Yerry Mina en ataque. Por primera vez un defensor central se va de una copa del mundo con 2 goles a su favor.
Estoy muy orgulloso del trabajo que realizamos todos. Cuerpo técnico y jugadores.
5. ¿Por qué Pékerman no renovó contrató después de Rusia 2018?
- Nosotros queríamos renovar. Pusimos sobre la mesa nuestras exigencias económicas, que por supuesto tenían un incremento gracias a los logros conseguidos. Lo considerábamos justo. Sin embargo, los dirigentes de la Federación estimaron que el costo era muy elevado. ¿Sabe que es lo paradójico? Que terminaron gastando más plata en los 2 cuerpos técnicos que firmaron después de nosotros (Queiroz & Rueda) sumado a la multa que tuvieron que pagar de 16 mil millones de pesos por el escándalo de corrupción relacionado con la boletería en el Mundial de Rusia 2018. Yo lo invito, estimado periodista, a que haga unas cuentas matemáticas. Sume cuánto dinero le entró a la Federación Colombiana de Fútbol mientras nosotros estuvimos en el cuerpo técnico, por concepto de: clasificación a los 2 mundiales, más la clasificación a cuartos de final en Brasil 2014, más la clasificación a octavos de final en Rusia 2018, más el tercer puesto en la Copa América Centenario en 2016. Todos esos dineros en dólares. Si Ud. suma todo eso le va a dar plata para pagar un cuerpo técnico costoso como era el nuestro y le sobra. En cambio, con las decisiones que tomaron, gastaron más plata y no clasificaron al Mundial. Creo que la Federación se metió un autogol tanto financiero como deportivo. Malas decisiones.
6. ¿Qué opinión tiene de Reinaldo Rueda?
- Con todo el respeto que me merece le doy mi opinión. Reinaldo Rueda es el mejor técnico que tiene Colombia actualmente. Por formación, por capacitación, por experiencia, por conocimientos del fútbol colombiano y del futbolista colombiano, no me cabe duda que es el mejor técnico colombiano hoy. Además de sus capacidades profesionales es una persona íntegra, es un ser humano respetuoso y caballeroso. Personas como él hoy en día quedan pocas. Me parece que lo que le falta a Reinaldo Rueda tiene que ver con la conformación de su equipo de trabajo. De nuevo, con mucho respeto se lo digo: no considero que tenga un cuerpo técnico de primerísimo nivel. Podrá ser bueno, pero no de un nivel superlativo.
7. ¿Cree que Colombia tiene, además de Rueda, otros buenos entrenadores?
- Acá le voy a dar mi concepto. En el tema de los entrenadores también hay un proceso. En ese proceso evolutivo Colombia está en el nivel de haber conquistado Centro América y los países vecinos (Ecuador y Perú). El entrenador colombiano que más lejos ha llegado es Osorio en México y el propio Rueda en Chile. Colombia aún no exporta entrenadores como sí lo hace con los futbolistas. Si Ud. mira, Argentina ya conquistó Centro América, Suramérica, incluso Europa. Argentina tiene entrenadores exitosos en las ligas más importantes de Europa. Simeone es rey en España y varios entrenadores argentinos ya han dirigido en la Premier League. El técnico del Paris Saint Germain es un argentino. Entonces si Ud. compara ese proceso evolutivo de los entrenadores colombianos con los argentinos se dará cuenta que hay mucho camino por recorrer. Argentina tiene 2 técnicos campeones del mundo. Colombia ninguno. Me parece que a veces ustedes en Colombia no son conscientes de ese proceso evolutivo y esperan que llegue un técnico y salga campeón de la nada, cuando en ese proceso ni siquiera están exportando técnicos a las ligas más importantes del mundo.
8. ¿Cómo ve a la Selección Colombia de hoy?
- Esta es la pregunta más difícil de todas. Porque la veo desde lejos, no desde el interior. La veo como un hincha más, como alguien cercano que conoció la interna pero que hoy está lejos. ¿Qué le puedo decir? Que tiene a un gran entrenador y tiene muy buenos jugadores. Creo que algo sucedió en el interior del grupo en aquellos partidos contra Uruguay y Ecuador. Algo se rompió. Y creo que Rueda ha intentado reconstruir esa confianza que se perdió. Pero no lo ha logrado del todo. Desde mi perspectiva personal considero que el principal problema de la Selección Colombia hoy pasa por la confianza. Si tanto se habla de un equipo que no mete goles, teniendo los goleadores que tiene, es porque hay un problema de confianza. También de generación de fútbol ofensivo, por supuesto. Pero, le pregunto yo, ¿qué culpa tiene el técnico si un centro delantero falla un gol con el arco vacío? Hay un problema de confianza, de autoestima. Y creo que es el momento para trabajar muy duro en ese aspecto. Si lo solucionan, podrían lograr lo imposible: los 9 puntos de 12 que necesitan para clasificar. Pero aquí hay mucho trabajo por hacer y no sé si el tiempo que queda les alcance.
9. ¿Qué opinión tiene de James Rodríguez?
- Mire, el tema de James es delicado. James tiene falencias de tipo emocional. A los 14 años fue enviado a Argentina a vivir en una pensión, lejos de su entorno familiar (tan importante en la formación de un adolescente) a vivir en un ambiente hostil y si se quiere “cruel”. Él logró salir adelante y vencer innumerables obstáculos de todo tipo. Lo que él hizo para llegar a ser futbolista profesional no tiene nombre. A punta de muchos sacrificios, de mucha berraquera como dicen ustedes en Colombia. Gracias a su talento logró destacarse y ganarse un puesto en el ámbito profesional. Pero sus falencias emocionales siempre han estado ahí. Y fue con la fama después del Mundial 2014 que todo vino a “reventar”. Era apenas normal. Si Ud. analiza, con el único técnico que él ha logrado triunfar profesionalmente es con Ancelotti. Porque Ancelotti, al igual que nosotros en la Selección Colombia, entendió la importancia del factor humano en el caso James Rodríguez. El factor sicológico. Es un buen muchacho, pero necesita mucha asistencia sicológica que le ayude a llevar la fama deportiva con las exigencias del fútbol actual y del entorno actual. No es fácil. Pero tampoco es imposible. Nosotros logramos equilibrar esas falencias emocionales y potenciar lo mejor del futbolista. Creo que Colombia debe estar agradecida con James por lo que hizo con la Selección.
10. ¿Para terminar, profesor Pékerman, volvería a dirigir la Selección Colombia?
- Mientras estén los directivos que están hoy en la Federación Colombiana de Fútbol es bastante improbable. Aprovecho para decirle que yo quiero mucho a Colombia, la llevo en el corazón y no podría decirle que la puerta está cerrada de manera definitiva. Mi afecto por Colombia es genuino y nunca va a cambiar.