Un caso peculiar ha surgido en la Clínica Regional Caribe de la Policía, ubicada en Barranquilla. Durante tres años, Maira Alejandra Zapata desempeñó sus labores como médica en la institución, a pesar de que su nombre no figura en el registro nacional de médicos.
La contratación de la doctora Zapata tuvo lugar en 2021, destacándose por su compromiso y cumplimiento riguroso de sus deberes médicos. Atendió a los pacientes, recetó medicamentos y ofreció recomendaciones valiosas. Sin embargo, su misteriosa desaparición antes de la finalización de su contrato en 2023 generó interrogantes.
Se hizo pasar por médico durante tres años en clínica de la Policía en Barranquilla
Conflictos internos entre funcionarios de la clínica revelaron irregularidades en los procesos de contratación, dando lugar a una comisión especial encargada de abordar la situación. Durante las investigaciones, se llevaron a cabo verificaciones exhaustivas de los documentos de los contratos, tras lo cual Maira Alejandra desapareció sin dejar rastro.
La Fiscalía y la Procuraduría General de la Nación asumieron la investigación, concluyendo que la presunta doctora trabajó durante tres años consecutivos en la clínica de la Policía de Barranquilla. Su desaparición coincidió con la alerta generada por la Dirección de Sanidad de la Policía, al percatarse de que su nombre no figuraba en los registros nacionales de profesionales de la salud graduados. Además, se descubrió que las experiencias laborales que respaldaban su contrato eran completamente inventadas.
También puede leer: Rociaron whisky en el ataúd y lanzaron tiros al aire: funeral de hombre asesinado en atentado en Valledupar
La Dirección de Sanidad de la Policía, al explicar los hallazgos, manifestó: “En el marco de las verificaciones realizadas a través de controles internos de la Dirección de Sanidad de la Policía Nacional, se evidenciaron una serie de inconsistencias en algunos procesos de contratación de la Unidad Prestadora de Salud (Upres) Atlántico. Se determinó que una profesional de la salud no estaba inscrita en el Registro Único Nacional de Talento Humano en Salud (Rethus), situación que generó una alerta sobre el contrato detallado”, según declaraciones proporcionadas a la revista Semana.
