La delincuencia tiene azotada las ciudades y ante la falta de autoridad efectiva, algunos ciudadanos han optado por tomar justicia por mano propia o incluso, como en este caso, escudarse en la legítima defensa, para combatir a los ladrones.
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El pasado martes un ladrón a bordo de una moto se acercó a un joven de un auto blanco que se encontraba estacionado frente a unas casas. El delincuente encañonó al sujeto para que este le diera su celular, cosa que el conductor hizo por temor a que le disparara.
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Presto a huir con el botín, el ladrón se subió a su motocicleta que había dejado estacionada justo detrás del carro que acababa de robar. La víctima del asalto, rápidamente reaccionó y emprendió marcha atrás, atropellando al delincuente y ‘ensanduchándolo’ con todo y moto contra una camioneta que estaba parqueada unos cuantos metros más atrás, causando la muerte instantánea del bandido.
En este suceso ocurrido en la colonia 15 de septiembre de Tegucigalpa, Honduras, las autoridades locales identificaron al delincuente como José Napoleón Reyues Mendoza, de 35 años. Vecinos del sector aseguraron que este ladrón solía robar por esta zona y que ya varios habían sido víctimas de sus fechorías.
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La madre de la víctima del robo le aseguró a La Prensa que su hijo “lo atropelló en defensa propia” y que hay varios testigos que presenciaron el hurto armado.
