No cesa el choque de opiniones frente a las recientes declaraciones del presidente, Gustavo Petro, desde Magangué, Bolívar, sobre el manejo de la alimentación en las poblaciones más vulnerables.
“Cuando el ICBF entrega bienestarina está cometiendo un grave error, porque es un producto importado al por mayor. Ellos lo hacen, lo combinan en la fábrica. Tienen contratista para eso y reparten a los niños. (Cuando) no se la roban”.
Y agregó que, en cambio, “el territorio puede dar la alimentación, si el estado y el gobierno, eleva la rentabilidad de los productos que se pueden conseguir acá”.
Declaraciones que no fueron bien recibidas desde la oposición. “Parece una inocentada para los niños más vulnerables de Colombia, que el Presidente @petrogustavo prohiba la distribución de Bienestarina para su alimentación. Muy grave. Será el responsable de más desnutrición infantil. Dogmatismo en su máxima expresión. Ojalá lo reconsidere”, trinó ‘Fico’ Gutiérrez.
Te puede interesar: Gustavo Petro dice que dólares de la cocaína ya no llegan a Colombia, se quedan en Wall Street
¿Qué es la bienestarina?
La bienestarina, un complemento nutricional que llega a más de 2,5 millones de niños, según el ICBF hace 46 años, consta de 19 ingredientes, principalmente: harina de trigo, harina de soya y fécula de maíz.
“Es la única mezcla vegetal en Latinoamérica que tiene Omega 3, ideales para el cerebro. Es de alto valor nutricional”, explicó el nutricionista clínico, Luis Becerra, en entrevista a Noticias Caracol.
Insumos, que según, Jorge Bedoya, presidente de la Sociedad de Agricultores de Colombia, sí se producen en el país, pero no en gran medida.
“Históricamente hace muchos años no se produce trigo. Se importa al año más de un millón de toneladas. Entonces, si el país quiere producir estas materias primas, necesito primero mirar el tema de semillas, volúmenes y modelos de negocio”, señaló para Noticias Caracol.
Desde el gobierno ratifican que el objetivo de esta iniciativa es potenciar la soberanía alimentaria, fortalecer el campesinado y las redes de abastecimiento. “Se buscará que esos complementos sean con productos nacionales”, aseguró el director de la UNGRD, Javier Pava.
A lo que la directora de Prosperidad Social, Cielo Rusinque, añadió: “Evitaría la tercerización. Y que el beneficiario sea el campesinado”.
