El 31 de diciembre despedimos el 2021 y damos la bienvenida al Año Nuevo 2022. A la medianoche aprovechamos para pedir deseos, mentalizar metas y aplicar uno que otro ‘truquito’ que le de esa pizca de fe a nuestros anhelos. Que se acabe el COVID-19, superar la pandemia, tener salud, empleo y economía es el común de las personas con quien conversó este diario en la calle.

Quitarse la mascarilla, respirar aire puro y retomar la vida que teníamos en hace dos años es lo que han expresado las personas como parte de sus deseos. No faltó quien pidió porque los perritos de la calle consigan un hogar lleno de amor y sean esterilizados, como lo fue un rescatista que tiene 16 canes bajo su tutela y espera darle cobijo a más.

Los adultos mayores, en cambio, se enfocaron en el ámbito político y la situación país. Se refirieron al empleo y la economía que atraviesa el Ecuador en estos momentos.

Pero lo más importante, es que la mayoría anhela abrazar a sus seres queridos y es su mayor cábala para que se cumplan sus deseos de Fin de Año.

Lo más jóvenes optan por el calzón amarillo para, según creencias populares, atraer la prosperidad y específicamente el dinero. Las 12 uvas no pueden faltar en la mesa de cada uno y comerlas con cada campanada del reloj a la medianoche. Infaltable la maleta en un señor que aseguró es para que durante el año se presenten viajes y sí se le han cumplido como comentó.

Deseos de las personas

Yulexi Vázquez, 24 años.

Cábala: Me pongo las prendas de color amarillo y me como las 12 uvas.

Jennifer Espinoza, 28 años.

Cábala: Siempre con mi familia tomamos vino y comemos las 12 uvas.

Verónica Cadena, 52 años.

Cábala: Mi cábala es rescatar perritos en año nuevo para darles el mejor del mundo.

Jorge Recalde, 65 años.

No tiene cábala.

Eduardo Bravo, 78 años.

Cábala: De vez en cuanto las uvas y me junto con mis familiares, es lo más importante.

Galo Granda, 72 años.

Cábala: Saco la maleta para los viajes que sí me ha funcionado y las uvas para la abundancia también.

Juan Diego Ventimilla, 28 años.

Cábala: Mi única cábala es pedir por mis seres queridos.

Vanessa Fiallo, 29 años.

Cábala: Mi cábala es saltar el año viejo.

Anónimo.

Cábala: No tengo cábala, yo labro mi propio destino.