Una intensa etapa se vivió en el Giro D’ Italia, albergando el recorrido entre Diamante y Potenza. Se vivieron 196 kilómetros cargados de montaña y de complejos descensos, un panorama ideal para la afición ciclística. Además, se contemplaba un desnivel acumulado de 4.500 metros.
A pesar de la ausencia de ‘Superman’ López, todavía quedan ‘escarabajos’ colombianos que pueden darle un nombre en alto al país y a sus respectivos equipos. Diego Camargo, el boyacense que defiende los colores del Education First, se perfilaba como animador de la etapa tras escaparse del pelotón. Junto con seis corredores, cuando faltaban 50 kilómetros de cara al final, allí se encontraba Camargo peleando con Tom Dumoulin.
Parece que las piernas no iban a alcanzar. Diego Camargo salió de la lucha por el pelotón. Dumoulin, como es habitual para este tipo de situaciones, se desató y dio cátedra en el descenso.
Koen Bouwman, quien ganó la bonificación de montaña a falta de 25 kilómetros aproximadamente, se metía en la pelea para llevarse el triunfo de etapa. El pelotón se mantenía lejos todavía en ese entonces, a un poco más de 3 minutos.
Entre los competidores en el pelotón, se destacaba también Bauke Mollema para el Trek-Segafredo, así como Davide Formolo a servicio del UAE Emirates.
En aras de la llegada a Potenza, el ascenso exigidísimo iba a rematar las piernas de varios de los competidores en fuga. Las calles empinadas marcaban la pauta, mientras que el desgaste era mayor. Bauke Mollema obtenía la bonificación del sprint intermedio, cuando restaban unos 6 kilómetros para la meta.
Entre Mollema, Bouwman y Formolo se iba a definir la cuestión; no obstante, Dumoulin estaba detrás a contados segundos de la fuga, expectante por si había errores. El neerlandés volvió a incorporarse a la fuga; era evidente, solo le servía la victoria de etapa.
Ya sobre el último kilómetro, y ante una rampa complejísima con subida del 14%, la explosividad de Koen Bouwman fue protagonista para imponer el ritmo y se estrenó como vencedor. Una etapa redondita para el Jumbo-Vizma.