Lionel Messi se vio saboteado en el duelo entre el Olympique de Marsella y el PSG en la jornada 11 de la Ligue 1.
Del partido que terminó con igualdad a cero goles quedó poco para el recuerdo. No hubo anotaciones ni jugadas de antología, pero sí una acción impensada que sorprendió a todos.
Cuando se jugaba el minuto 73, PSG emprendió un contraataque que era liderado por Lionel Messi.
La jugada prometía ya que la defensa rival estaba descolocada, pero todo quedó en anécdota ya que de la nada salió un intruso con ganas de darle un abrazo.
El hombre logró burlar la seguridad del escenario y alcanzo a La Pulga que vio frustrada su acción en el compromiso.