“El banquete del emperador” es el título de la exposición con la que el artista chino Ai Weiwei llega a Colombia y donde funde la cultura milenaria de ese país con lo actual echando mano de los bloques de Lego para expresar su visión del mundo a través de las artes.
La Galería La Cometa consiguió que la obra del activista chino llegue al país, ya que tras años de intentarlo pudo traer la exposición que se abrirá al público el próximo sábado en Bogotá para luego viajar a Medellín en donde estará en marzo de este año.
“Para Galería La Cometa y para el arte en Colombia traer a Ai Weiwei es, sin duda, un logro muy grande, un orgullo también y un reconocimiento a una labor muy bien hecha”, dijo esta semana el director de La Cometa, Esteban Jaramillo, citado en un comunicado.
El galerista destaca que el objetivo de La Cometa es poner a Colombia en el panorama del arte contemporáneo internacional, una tarea que han desarrollado desde hace más de 30 años.
Ai Weiwei es considerado un exponente de las vanguardias del siglo XXI, al igual que lo fueron Marcel Duchamp y Andy Warhol de las avanzadas artísticas del siglo XX.
El nombre del artista plástico ha estado por años en museos, bienales y galerías del mundo en donde no deja de lado su lucha por los derechos humanos y su activismo político que, incluso, lo llevó a estar preso en una cárcel china por supuesta evasión fiscal.
En “El banquete del emperador” Weiwei ensambla un producto industrial del mundo moderno, como el de los juguetes Lego, con la historia milenaria del zodiaco chino, creando con su serie de cuadros zodiacales réplicas artificiales de elementos celestiales.
Según la leyenda, los doce animales, en su orden astrológico, son elementos celestiales convocados por el emperador a un suntuoso banquete cuyas energías cósmicas cobran cuerpo año tras año en nuestra percepción del mundo.
Para Daniela Marín y Andrés Córdoba, curadores de La Cometa, adquirir una obra de Ai Weiwei es “dar un paso adelante y muy certero a la hora de armar una colección de arte contemporáneo”.
En la exposición el público podrá apreciar piezas “únicas e irrepetibles” de casi dos metros de alto, que hacen parte de una serie hecha por el artista y curador.
El artista asiático -que participó en la construcción del Estadio Olímpico de Pekín en 2008, conocido como el “nido del pájaro”-, es reconocido por su oposición abierta al régimen comunista.
El artista, de 64 años, es hijo del poeta chino Ai Qing, quien fue denunciado durante el movimiento antiderechista de China. Su familia fue exiliada, enviada a un campo de trabajo y finalmente trasladada a Pekín. EFE
