El calentamiento global es un fenómeno que no tiene reversa. Cada grado de incremento en la temperatura de la tierra supone un 7% más de precipitaciones y el aumento de la ocurrencia de olas de calor hasta 9,4 veces más que en el pasado, reveló recientemente el Grupo Intergubernamental de Expertos para el Cambio Climático (IPCC).
“El calentamiento global tiene que ser una preocupación de todos los actores de la sociedad”, dijo Zandra Mantilla, Gerente de aseo de Triple A, empresa de acueducto, alcantarillado y aseo en Barranquilla y 14 municipios de la Costa Caribe.
Por esta razón, iniciativas como la Alianza de biodiverciudades, conformada por 11 ciudades capitales del país, toman un papel relevante en el cambio de consciencia sobre los efectos del cambio climático.
El proyecto consiste en crear un sistema de vigilancia ambiental para mejorar la disponibilidad de información de calidad de aire, y así, fortalecer las acciones de prevención y control de la contaminación atmosférica.
«Es fundamental hacer pedagogía y motivar a las personas a seguir buenas prácticas en los hogares para hacer la diferencia y salvar al planeta”, agregó la directiva de Triple A.
Para preservar la vida, ralentizar el calentamiento acelerado del planeta y mejorar la calidad del aire, en las casas, barrios y comunidades hay que dar el primer paso. Poner en práctica alguno de los siguientes consejos garantizará un entorno más seguro y libre de contaminación:
1. Usar medios de transporte alternativos como la bicicleta o sistemas de transporte masivo:
Al reemplazar el carro particular por la bicicleta o el bus, las vías principales se descongestionan en las ciudades, hay ahorro de dinero al dejar de comprar combustible, y al subir a una bicicleta se fortalece la salud al hacer ejercicio.
2. No quemar la basuras:
La revista Environmental Science and Technology publicó un estudio en el cual revela que el material derivado de la quema de basuras genera polvo, cenizas, hollín y cemento, compuestos que son capaces de penetrar los pulmones y producir alergias, neumonía y cáncer de pulmón.
3. Cerrar la llave y ahorrar agua:
Por un grifo abierto corren hasta 12 litros de agua por minuto. Es ideal cerrarlo mientras se realiza el lavado de manos o el cepillado de los dientes.
4. Ahorrar energía eléctrica: Cerrar bien la puerta de la nevera después de sacar un vaso de agua fría puede disminuir el consumo de energía en un 20%.
5. No usar aerosoles que contengan gases de efecto invernadero: Evite comprar los que contienen clorofluorocarbonos. Estos representan peligro para la atmósfera, pues el gas que sale del spray logra subir hasta la estratósfera, donde se acumula y destruye la capa de ozono.