ELN niega ser autor del atentado contra la base militar en Cúcuta. Esta guerrilla afirmó que «ninguna» de sus estructuras participó en el atentado del pasado martes.
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En dicho atentado un carro bomba explotó al interior de la base militar. Allí había personal de Estados Unidos y en el que resultaron 36 heridos.
«Nos permitimos informarles que ninguna estructura del ELN tiene que ver con el ataque que se presentó el martes 15 de junio en la Brigada 30 de la ciudad de Cúcuta, Norte de Santander«, dijo la insurgencia.
La comunicación fue en un escueto video de apenas 39 segundos, con la voz y la imagen distorsionadas, que fue difundido en una página web y canales relacionados con la guerrilla.
El atentado
El pasado martes, una camioneta blanca cargada con explosivos entró a las instalaciones militares de esa ciudad fronteriza con Venezuela.
Dos hombres ingresaron en el vehículo y suplantaron a funcionarios. Poco después ocurrieron dos explosiones, según explicó el ministro de Defensa, Diego Molano.
En el ataque resultaron heridas 36 personas -tres de ellas «con algún nivel de gravedad«- entre las que se encontraban tres civiles.
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Molano apuntó como primera hipótesis a la autoría del ELN. Sin embargo, aseguró que se investiga la posibilidad de que fuese perpetrado por disidencias de las FARC. Grupos que actúan en esa zona, escondidas supuestamente en Venezuela.
La forma del ataque recuerda al cometido el 17 de enero de 2019 por el ELN, también con coche bomba. En esa oportunidad fue contra la Escuela de Cadetes de la Policía General Santander de Bogotá, en el que murieron 22 cadetes, entre ellos una ecuatoriana, y otras 67 personas resultaron heridas.
Las explosiones de esta semana en Cúcuta, que se vieron desde barrios vecinos, afectaron especialmente a un área de oficinas. Según algunos militares, esa área estaba vacía ya que parte del personal de la brigada, adscrita a la Segunda División del Ejército, se encuentra en cuarentena por el coronavirus.
El Gobierno parece que ha dado pasos hacia una posible nueva toma de contactos con el ELN. Todo después de que el exalto comisionado para la paz Miguel Ceballos dijese el pasado 11 de mayo que estarían dispuestos a suspender las órdenes de extradición de los jefes de la guerrilla, que permanecen en Cuba.
El Ejecutivo condiciona ese nuevo proceso a que ese grupo deje en libertad a los secuestrados y cese el reclutamiento de menores.
Las relaciones bilaterales de Colombia y Cuba se encuentran enturbiadas tras la negativa de la isla de extraditar a cuatro miembros del ELN. que permanecen en La Habana luego del fallido diálogo de paz con el anterior Gobierno en 2017 y 2018.