A través de su cuenta de Twitter, la gobernadora Clara Luz Roldán informó que el departamento entrará en toque de queda desde el 17 hasta el 27 de diciembre, entre las 11:00 p.m. y las 5:00 a.m., con el objetivo de disminuir las aglomeraciones en Navidad.
La medida aplica para 40 de los 42 municipios, pues Cali y Buenaventura tienen autonomía en sus decisiones por tener categoría de distritos especiales.
Durante las mismas fechas se retomará el pico y cédula, regulación aplicada para el ingreso a los almacenes de grandes superficies y centros comerciales.
«Esta es una medida inicial, pero puede extenderse nuevamente si los casos siguen aumentando y la ocupación de UCIs y de servicios vitales sigue al límite. La situación que vivimos es preocupante y es responsabilidad de todos mantener el control y priorizar la vida, cuidándonos», indicó la gobernadora.
Otra de las decisiones reafirmadas fue la suspensión de las cirugías programadas, que se retomarán una vez disminuya el nivel de alerta naranja en el que se encuentra el departamento.
Según Roldán, hay 25 niños con COVID-19 en Unidades de Cuidados Intensivos: «El contagio ha ido aumentando debido a las aglomeraciones y a la falta de aplicación de las medidas de bioseguridad».
Actualmente, en el Valle del Cauca se registra una ocupación de camas UCI que supera el 85%. “Se están registrando 750 casos promedio diario en nuestro departamento”, dijo la secretaria de Salud, María Cristina Lesmes.
Decisiones en Cali
El alcalde Jorge Iván Ospina anunció este miércoles que a la ciudad regresarán el pico y cédula, el toque de queda y la ley seca entre el 16 y el 23 de diciembre, con posibilidad de extenderse si no se logra controlar la velocidad de contagios.
Así, el consumo de licor estará prohibido entre las 10:00 p.m. y las 5:00 a.m., mientras el toque de queda regirá desde las 11:00 p.m.
