Salvatore Mancuso, excomandante de las paramilitares Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), y Rodrigo Londoño, último jefe de la guerrilla de las Farc, reconocieron este viernes los crímenes que esos grupos cometieron contra comunidades indígenas, por los cuales pidieron perdón.
Las declaraciones de Londoño y Mancuso ocurrieron en el encuentro «Pueblos indígenas en situación y riesgo de exterminio físico y cultural: su dignidad, resistencia y aportes a la paz», organizado por la Comisión de la Verdad con el objetivo de contribuir al esclarecimiento de lo ocurrido en el conflicto armado.
En el acto, realizado virtualmente por la pandemia de la COVID-19, también participaron líderes indígenas de comunidades repartidas a lo largo y ancho del país que relataron las atrocidades de las que fueron víctimas, perpetradas por las Farc, las AUC y el Estado colombiano.
COMUNIDADES NATIVAS EN RIESGO
Según la Comisión de la Verdad, en Colombia existen 115 pueblos indígenas que conservan 65 idiomas nativos, de los cuales la mayoría han sido afectados por el conflicto armado.
En esa línea, el organismo creado tras la firma del acuerdo de paz entre el Gobierno y las Farc en 2016 alerta que de esos pueblos hay 68 que «están en grave situación y riesgo de exterminio físico y cultural por el conflicto».
El Estado colombiano ha reconocido 752 resguardos en territorios ancestrales de estos pueblos, que ocupan aproximadamente 34 millones de hectáreas.
«Hay un riesgo físico y cultural de nuestros pueblos en el marco del conflicto armado, hechos que no han cesado y que por el contrario se agudizan en los territorios. En lo que llevamos del 2020 han sido asesinadas 89 autoridades indígenas», manifestó la indígena Patricia Tobón Yagari, comisionada de la verdad.
En respuesta al reconocimiento que hicieron Mancuso y Londoño, el secretario de la Mesa de concertación Indígena, Gerardo Jumí, aseguró que el conflicto ha dejado más de 3.000 víctimas de las comunidades aborígenes y que ellos no quieren que esta barbarie continúe.
«No se privilegia desde el lado de los pueblos indígenas una verdad procesal o judicial; aunque es necesaria, se quiere saber más de la verdad histórica como garantía de no repetición. Nuestras autoridades y nuestros sabios ofrecen el perdón a cambio de la verdad histórica», expresó.
La Comisión de la Verdad forma parte del Sistema Integral de Verdad, Justicia, Reparación y No Repetición, que incluye además la Unidad para la Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas y la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP).