El niño de tres años sufrió graves quemaduras tras caer a una caldera llena de melaza hirviendo en Santander.
Un niño de tres años, hijo de una trabajadora de un trapiche en San Joaquín (Santander), sufrió graves quemaduras. El menor de edad cayó este jueves a una caldera en la cual se hervía melaza para elaborar panela.
El menor, según el diario Vanguardia, es hijo además de un soldado profesional del Ejército. Su padre logró coordinar el traslado de su hijo desde el hospital de San Gil, a donde el menor fue trasladado en un primer momento, a Bucaramanga, en un helicóptero de la Fuerza Pública.
Allí es atendido en el Hospital Universitario de Santander, para atender las graves quemaduras que sufrió. Estas afectaron la gran mayoría de su cuerpo, lo que tiene la vida del niño en riesgo.
El hospital anunció en un comunicado que recibió al niño de tres años a las 4:00 pm de este jueves. «A causa de un accidente en una caldera de un trapiche panelero sufrió quemaduras de tercer grado en más del 95% de su cuerpo. El paciente se encuentra en estado crítico debido a la gravedad de las quemaduras y el pronóstico es reservado», dice el comunicado.