Un escándalo se ha desatado en el país tras conocerse que el recién nombrado ministro de Justicia fue al partido de la Selección Colombia con sus dos hijos.
El partido en el estadio Metropolitano, que fue a puerta cerrada y en donde varias personas incumplieron la medida de ir a pesar de la pandemia.
Wilson Ruiz, el nuevo ministro, aceptó que recibió entradas de la Federación Colombiana de Fútbol para asistir.
El caso, más allá del apunte ético, queda para la posteridad pues el ministro conforma la Comisión Disciplinaria que investiga el tema de la reventa de boletas de la selección.
La Procuraduría ya inició las indagaciones sobre quiénes fueron al partido, a pesar de que estaba prohibido.
Muchos esperan que el ministro renuncie a la comisión que investigará asuntos del fútbol colombiano.
