Un grupo de líderes sociales realizó este viernes en Bogotá un plantón para protestar contra los asesinatos de indígenas, campesinos, afrodescendientes y personas de la comunidad LGBT, al tiempo que le exigió al Gobierno colombiano que se haga justicia y que los culpables sean encarcelados.
«Estamos pidiéndole al Gobierno del presidente Iván Duque que se haga justicia, que las violaciones y asesinatos de niñas indígenas y de otras mujeres, de campesinos, de defensores de derechos humanos y líderes sociales no queden en el olvido», dijo a Efe por teléfono Felipe Moreno, integrante de la llamada Marcha por la Dignidad.
LARGA MARCHA
El grupo -que salió el pasado 25 de junio de Popayán, capital del departamento del Cauca (suroeste)- llegó hoy a Bogotá, en donde realizó varias actividades, entre ellas un plantón en el centro de la capital en donde fue herido el joven estudiante Dilan Cruz.
El 23 de noviembre del año pasado Cruz fue herido por un miembro del Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) de la Policía colombiana que disparó en una protesta pacífica que se realizaba en Bogotá.
«Salimos a las calles a marchar a defender la vida y vemos con alegría que hemos tenido una acogida enorme en Bogotá. Invitamos al pueblo colombiano a marchar, a salir a las calles por la defensa de la vida», apostilló Moreno, quien dijo que del grupo hacen parte también sindicalistas, miembros de guardias indígenas y campesinos.
A los plantones se fueron sumando personas que le pedían al Gobierno crear fuentes de empleo, no privatizar la petrolera Ecopetrol, mejor atención en salud y estudiantes que pedían que no les cobraran la matrícula y subsidios para poder seguir en las aulas.
VELATÓN DE CIERRE
Los miembros de la Marcha por la Dignidad cerraron el día con una velatón que, según Moreno, era para «recordar a todas las personas que han sido asesinadas, desaparecidas y desplazadas a raíz de la falta de garantías para vivir en los territorios que más han sufrido por el conflicto armado y la pobreza».