Un insólito caso ocurrió en medio de una requisa en Medellín. Un par de delincuentes que se movilizaba en una moto fue requerido por un agente de policía. La requisa terminó con el agente amenazado y robado, literalmente: los delincuentes le robaron su arma de dotación.
El caso se registró en el sector Castropol de la comuna El Poblado. La requisa la adelantaban dos agentes, pero los delincuentes forcejearon con uno de ellos y la otra, aparentemente, retrocedió. Los delincuentes, después del robo, abandonaron la motocicleta varias cuadras adelante. Luego huyeron a pie, con destino desconocido.
Provocó seria indignación, también, la respuesta del comandante de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá, general Eliécer Camacho. El oficial aseguró que «el arma se extravió en medio de un forcejeo con los delincuentes». Indicó que se adelantan operativos en la ciudad para dar con el paradero de la pistola luego de la requisa en Medellín.
Uno de los objetos de la investigación es identificar qué ocurrió con la compañera del agente que sufrió el robo de su arma de dotación. Aunque los testigos aseguran que ella retrocedió para protegerse, la Policía asegura que lo hizo para pedir refuerzos.
También se investiga cuál era el objetivo de los delincuentes. La zona de El Poblado es una de las más afectadas en Medellín por los «fleteos». Justamente, el operativo buscaba detener a algunas de las bandas dedicadas al robo.
