Hay cosas con las que no se juega. Zarisha Bradley, una periodista residente en Darwin, Australia, puso en peligro su vida al querer tomarse una selfie al lado de un cocodrilo en medio de una reserva natural. La cronista estaba realizando un reportaje, pero por dispersión quiso tomarse una foto muy cerca de Bonecruncher, el nombre del reptil.
Primero posó y, luego, recibió el celular donde se iba tomar la foto. En ese momento se percató del movimiento del cocodrilo, que intentó morderla. Por fortuna, ello pudo esquivar al animal, aunque no sin antes lanzar insultos al aire.
Periodista se tomó selfie al lado de un cocodrilo y se llevó el susto de su vida
Pese al momento que pudo convertirse en tragedia, Zarisha aseguró que no le guarda rencor al animal, que fue rescatado tras los incendios de enero, presentados en Australia. Según ella, más allá del incidente, es el cocodrilo más especial que ha conocido.
Asimismo, la mujer contó que el cocodrilo no tiene un ojo y en su cuerpo posee varias heridas de lucha con otros reptiles.
«Le faltaba parte de su cola y tenía grandes cortes en su costado, probablemente fue una pelea territorial con otro cocodrilo», aseguró la periodista.
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