La Policía Nacional del Perú (PNP) se encuentra en coordinación con sus pares de Ecuador, Chile, Colombia y Venezuela para buscar y detener a una banda de delincuentes peruanos y venezolanos que asaltó una joyería de uno de los centros comerciales más exclusivos de Lima.
El jefe de la División de Investigaciones Criminales (Dirincri) de la PNP, Juan Carlos Sotil, advirtió en conferencia de prensa que dos venezolanos de los cuatro que integran la banda, entre ellos un hombre y una mujer, salieron de Perú el pasado 25 de junio, tres días después del robo.
Por ello, los investigadores tienen la hipótesis de que el resto de la banda, a excepción de uno de los cabecillas, que fue capturado la pasada semana, abandonaron el país probablemente por la frontera con Ecuador, para luego pasar a Colombia y quizás de ahí a Venezuela.
Sin embargo, tampoco descartan que salieran por algunos de los pasos fronterizos sin control que existen entre Perú y sus países vecinos.
El oficial aseguró que solo les falta identificar a una de las doce personas que intervino en el violento asalto, tras estudiar las imágenes de las cámaras de seguridad del centro comercial en el momento del robo y en los días previos, cuando los delincuentes acudieron al lugar para estudiar y diseñar la acción.
Sotil indicó que el único detenido hasta el momento, identificado como Francis Medrano, tiene antecedentes por posesión de armas de fuego y robo de vehículos, uno de ellos utilizado en el asalto a la joyería, y advirtió que estaba en libertad condicional mientras afronta otros procesos penales.
El policía aseveró que el capturado fue el encargado de diseñar la acción y reclutar a otras personas, entre ellas a los venezolanos, para ejecutarla.
El asalto a la joyería se produjo cerca de las 11.00 hora local en la zona peatonal del exclusivo centro comercial Jockey Plaza, a donde ingresaron con armas de largo y corto alcance y una maza para romper los vidrios de la tienda, lo que causó gran pánico entre los primeras personas que transitaban por el lugar, que acababa de abrir sus puertas.
En apenas minuto y medio se acopiaron de los lujosos relojes y joyas de los expositores y emprendieron una huida en la que se desató un enfrentamiento armado con dos policías a los que dejaron heridos.