Cada día los registros se llenan de números, cifras que representan a los hombres y mujeres que pierden la vida de manera violenta en Medellín. Algunos se logran identificar de inmediato, pero muchos otros, no. La última mujer que apareció en los registros fue hallada en un hotel del centro de la ciudad, envuelta entre sábanas y con signos de asfixia mecánica.
Poco después fue identificada como Daniel Uribe Marín, tenía 22 años, fue vista con vida el viernes 27 de octubre de 2017 cuando ingresó al hotel en compañía de un hombre. Él había reservado la habitación por tres días. Dos días después, el administrador sospechó que algo sucedía al no ver movimiento, se acercó a la habitación y se encontró con el cuerpo sin vida.
Justo el último día que Daniela fue vista con vida se conoció la muerte de Doris Elena Giraldo, de 46 años, quien fue hallada sin vida y con múltiples heridas de arma blanca en su cuerpo tendido en su cama, dentro de su propia vivienda. Según las investigaciones preliminares, Doris había conocido a un joven por redes sociales y recientemente le había expresado que solo quería ser su amiga.
Estos son apenas dos casos de los 50 que se han registrado entre el 1 de enero y el 31 de octubre de 2017, 52% más que los reportados en el mismo periodo durante el 2016.
¿Qué pasa en Medellín?
Patricia Luli, directora de la Corporación Vamos Mujer, una organización que desde 1979 ha estado trabajando por las mujeres de Antioquia y que ha establecido como uno de sus objetivos el promover el derecho a una vida libre de violencias, considera que es alarmante el aumento de casos de violencia contra las mujeres por el hecho de ser mujeres.
“Lo que más preocupa es que aún con una batería completa de normativa en Colombia a favor de los derechos de las mujeres, entre ellas la ley 1257 y la ley 1761, ley contra feminicidio promulgada en el 2015, no solo no se está logrando disminuir las situaciones de violencias que viven las mujeres, sino que están aumentando considerablemente”, dijo la directora.
Además agregó que las cifras no son solo números sino que representan las historias de las mujeres que fueron asesinas “por su condición de ser mujeres”. Por lo que considera que “es urgente que hombres y mujeres de la sociedad tengamos claro que por ninguna razón podemos justificar las violencias hacia las mujeres. Aquí no podemos relativizar las muertes excusándonos que los motivos han sido el microtráfico o que las mujeres hacen parte de las bandas criminales”.
Por su parte, Claudia Marín Mira, investigadora de la corporación Mujeres que Crean, una organización que desde 1990 está enfocada en el trabajo articulado para defender los derechos, la trasformación y el desarrollo de las mujeres de Medellín, dice que las muertes violentas de las mujeres no son una moda, ni que son una novedad, sino que han sucedido siempre.
“La ciudad de Medellín se ha debatido en un espiral de violencia permanente contra las mujeres, a parte de las otras violencias que conocemos, pero es claro que sube y baja, es un asunto cíclico que está en estos momentos disparado si se compara con las cifras del 2016 (entre 1 de enero y el 31 de octubre) donde hubo 33 asesinatos de mujeres, por lo que 50 es la tapa de la olla”, comentó Marín.
La investigadora es enfática en decir que no es nuevo que a las mujeres en Medellín las estén asesinando. “No son hechos aislados, es evidente que tienen que ver con una escalada que está marcada por el sistema en el que nos movemos, donde las mujeres somos permanentemente victimizadas y revictimizadas en relación a muchas formas de violencia, entre las que más se destacan la violencia doméstica, de pareja o intrafamiliar”.
Según la Fiscalía General de la Nación, Seccional Medellín, en lo corrido del 2017 se han registrado 9384 denuncias por violencia intrafamiliar que han sido procesadas en tres centros de atención a víctimas de violencia intrafamiliar, que se encuentran ubicados en la capital antioqueña, en el Sur y en el Norte del Valle de Aburrá. Del total de denuncias en el 95% de los casos los agresores son hombres y están asociados al consumo de alcohol y sustancias psicoactivas.
Marín se refiere a que el sistema de dominación, que se evidencia de múltiples maneras en la sociedad, es una de las razones por las que se generan las principales situaciones de violencia contra las mujeres. “Esa relación de verticalidad, de dominio, de imposición, eso es lo que permite naturalizar, de alguna manera, que las mujeres somos más débiles que los hombres y que está bien hablarles feo a las mujeres hasta llegar a golpearlas y luego matarlas. Tenemos claro que gran cantidad de los casos de homicidios de las mujeres tienen carácter de género”.
La acción de la Administración Municipal
La secretaría de la Mujer de Medellín, Valeria Molina, indicó que de los 50 homicidios reportados 17 casos son feminicidios, que considera importante aclarar porque los últimos ocurrieron por temas de violencia de género y expresó su preocupación.
“Lo que las mujeres deben saber es que en caso de estar siendo víctimas de violencia por parte de su pareja, novio, esposo o un hombre, es que tiene que acudir a la línea de atención de emergencia en el 123, donde se les brinda acompañamiento psicológico, jurídico y activamos la ruta con los entes que tienen que ver con violencia de género. Lo más importante es que las mujeres denuncien”, afirmó Molina.
La secretaria resaltó que es fundamental la denuncia, porque es el único mecanismo que puede evitar que los casos se conviertan en feminicidios. Actualmente la administración cuenta con cuatro centros de equidad de género, un centro móvil y campañas públicas para que las mujeres puedan pedir ayuda y recibir el apoyo de la institucionalidad.
“Están disparados los casos, estamos muy preocupados como administración municipal, pero estamos haciendo todo para que esto no ocurra en la ciudad de Medellín y las mujeres accedan a la ruta de apoyo que está disponible, pero vemos que en muchos de los casos estas mujeres que murieron no solicitaron ayuda ni denunciaron”, indicó la funcionaria.
Según la Secretaría de la Mujer, en Medellín las comunas en las que más se presentan casos de violencia contra la mujer son la comuna 10, la 4 y la 1. “Estamos trabajando en esos espacios con formación para cambiar los imaginarios que existen frente a las mujeres, esto ocurre por esa mirada patriarcal y machista que existe en todo Latinoamérica, porque no es un tema solo de Medellín”.
Raúl González Flechas, director seccional de Fiscalías de Medellín, indicó que el camino que tienen las mujeres es informar de inmediato a la Fiscalía que cuenta con un grupo de gestión de alertas tempranas en la Sede Caribe y que cuenta con un grupo de fiscales especializados para trabajar este tipo de situaciones.
“Lo primero que deben hacer las mujeres es informar a las comisarías de familia o una inspección de policía cercana al sector de residencia, que nos harán saber de manera inmediata a través de la Policía Nacional y así poder actuar judicialmente. Existe una ruta de atención con psicología y medicina legal en el caso de lesiones, pero tenemos que ser informados lo más oportuno posible», indicó González.
«Los 50 casos que se han presentado en Medellín son la punta del iceberg de las múltiples violencias que están ocurriendo» Claudia Marín, investigadora de la corporación Mujeres que Crean
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Las cifras
Entre el 1 de enero y el 31 de octubre de 2017 se han registrado 50 homicidios de mujeres, 52% más que los reportados en el mismo periodo durante el 2016, de los cuales 17 son feminicidios.
Según la Fiscalía General de la Nación Seccional Medellín, durante el 2017 se han registrado 9384 denuncias por violencia intrafamiliar en Medellín y el Valle de Aburrá.
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