En Medellín los participantes de la marcha se vistieron con camisetas negras y portaron pancartas en las que advertían que el sector está sumido en una grave crisis.
La Cámara Colombiana de la Confección (CCCA) explicó que la marcha tuvo como «objetivo la defensa del empleo, la sostenibilidad empresarial y la generación de condiciones de equidad para la industria nacional».
Según el gremio en India, Vietnam, Laos, Camboya e Indonesia la mano de obra cuesta menos de 30 dólares mensuales por jornadas de 14 horas, mientras que en Colombia un trabajador puede ganar hasta 400 dólares cada mes por ocho horas de trabajo cada día.
En el pasado mes de agosto la CCCA alertó del riesgo de perder 1,8 millones de empleos como consecuencia del contrabando y el ingreso de prendas de vestir procedentes de China.