El papa Francisco cantó este viernes el cumpleaños feliz a «una viejita valiente», una peregrina con la que se ha topado ya tres veces en su visita a Panamá para participar en la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), y afirmó que «los viejos arman lío pero con sabiduría».
En un acto fuera del protocolo, Francisco fue a saludar a un grupo de personas apostadas en las afueras de la Nunciatura, donde se hospeda en Panamá mientras participa en la Jornada, y se dirigió a la peregrina, que llevaba una pancarta y con la que se ha encontrado tres veces.
Esta escena, que ha sido difundida ampliamente en redes sociales, incluidas las de la JMJ, continúa con Francisco comentando que la señora, cuyo no nombre no ha trascendido, está de cumpleaños.
«Usted es viejita, que para joven quedo yo», bromea un alegre Francisco, y añade que la señora «es valiente y hoy cumple años, así que le cantamos cumpleaños feliz», ante lo cual tanto él como el grupo comienzan a recitar la famosa canción.
Al final, el papa saluda a la señora, a la que en principio le entregó un rosario según ha trascendido en medios locales, le da dos besos en las mejillas, bendice al grupo y se retira del lugar.
Ya el jueves, Francisco había mencionado en un reunión con los obispos centroamericanos que se había topado con esta señora.
«Hablando de las abuelas. Esta la segunda vez que la veo. La vi ayer y la vi hoy: una viejita así, flacucha. De mi edad o más todavía con una mitra.
Se había puesto una mitra con cartón y un cartel que decía ‘Santidad, las abuelas también hacemos lío’. Una maravilla de pueblo», comentó el jueves el santo padre.
Este viernes el papa también visitó a un grupo de 450 peregrinos cubanos que llegaron hasta Panamá para participar en la Jornada Mundial de la Juventud, en un encuentro que no estaba previsto y que duró 10 minutos, según informó el Vaticano.
Antes de su visita al centro de detención de menores de «Las Garzas» de Pacora, el pontífice se trasladó desde la Nunciatura hasta el cercano Colegio Esclavas para saludar a estos jóvenes.
«El papa llegó al final de la misa, impartió la bendición y dirigió un breve saludo a los presentes», explicó en una nota el portavoz del Vaticano, Alessandro Gisotti.
Durante su visita a Panamá por la JMJ, el santo padre se ha acercado en varias ocasiones al público, como el miércoles, día de su recibimiento en el aeropuerto internacional de Tocumen, cuando saludó a un grupo de personas invitada al acto oficial y besó a dos bebés, uno de ellos que le acercó el presidente panameño, Juan Carlos varela.
Ese día también se salió del programa establecido y llegó en el papamóvil a la Nunciatura, cuando debía haberlo hecho en un auto blindado que debía abordar a mitad de trayecto.
El papa, que permanecerá hasta el próximo domingo en el país centroamericano, ha cumplido una agenda oficial que ha incluido reuniones con autoridades del país, con obispos centroamericanos, y una visita este viernes a un centro de menores en conflicto con la ley, entre otras.